España cuenta con cerca de 350 parejas de cigüeña negra, según el último censo coordinado por SEO/BirdLife

A diferencia de la cigüeña blanca, la cigüeña negra no nidifica en zonas próximas al hombre, sino en lugares recónditos de las sierras y bosques del cuadrante suroccidental de la península Ibérica, sobre rocas o en grandes árboles. Inverna en Doñana y su entorno, en determinados embalses de Extremadura y en el valle del río Tiétar cada vez en mayor número por lo que esta especie también es una buena indicadora de los efectos que el cambio climático ejerce sobre la avifauna.

Desde hace unas décadas, concretamente desde 1987, la cigüeña negra se censa con cierta periodicidad en varias comunidades autónomas dada su catalogación de especie vulnerable a escala estatal. El trabajo de numerosos expertos y voluntarios ha originado un mejor conocimiento de la distribución y tamaño de población de la especie. Así, sabemos que España cuenta con 346 parejas de cigüeña negra y 40 probables (o lo que es lo mismo, que la población de cigüeña negra en 2017 en España está formada por 386 territorios).

“La cigüeña negra en España: Población reproductora en 2017  y método de censo”, una reciente publicación elaborada por el Área de Ciencia Ciudadana de SEO/BridLife nos desvela estos y otros muchos detalles sobre la especie.

Cigüeña_negra ©MartinMaritz-Shutterstock

Los datos de este trabajo reflejan un aparente ascenso de su población de forma general, pero esto puede ser debido a la mejora de la cobertura en este censo respecto a los previos. El hecho de que en todas las provincias periféricas donde se distribuye la especie se registre declive de sus poblaciones es el primer síntoma que alarma sobre un potencial declive de la especie. Además los parámetros reproductores de la especie tienen un declive considerable a escala estatal, lo que también alarma de posibles estancamientos o declives del número de cigüeñas negras que tendremos en los próximos años en nuestros campos.

¿Dónde se encuentra la cigüeña negra?

La cigüeña negra se encuentra limitada al cuadrante suroccidental de la península Ibérica y se reparte por cinco comunidades autónomas (Andalucía, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura y Madrid) y 13 provincias (Ávila, Badajoz, Cáceres, Ciudad Real, Córdoba, Huelva, Jaén, Madrid, Salamanca, Segovia, Sevilla, Toledo y Zamora).

Como viene ocurriendo en las últimas décadas, destaca la importancia de la comunidad autónoma de Extremadura y más concretamente la provincia de Cáceres. Extremadura, con 172 territorios, acumula el 49,74% de la población española. La segunda comunidad en importancia es Andalucía que con 94 territorios ocupados tiene otro 26,55% de la población. Ambas comunidades acumulan el 76% de la población estatal.

Evolución de la cigüeña negra en España. Fuente: SEO/BirdLife

Atendiendo a la división provincial, es Cáceres la provincia más destacada, pues acumula casi el 33% de la población estatal. La sigue en importancia Badajoz, también con una proporción importante (17%). Ya en porcentajes próximos o inferiores al 10% se encuentran Sevilla, Huelva, Salamanca y Ciudad Real, y por debajo del 5% del total estatal es Toledo, Córdoba, Jaén, Zamora, Madrid y Ávila. En Segovia había un territorio ocupado hasta hace pocos años y actualmente en este punto hay observaciones de ejemplares que hacen pensar en una pareja probable en la provincia.

“En todo el perímetro del área de distribución el declive de la especie es importante y los parámetros reproductores de toda la población están disminuyendo alarmantemente lo que puede indicar un inicio de declive poblacional importante en el futuro”, asegura Juan Carlos del Moral, coordinador del Área de Ciencia Ciudadana de SEO/BirdLife y de la publicación “La cigüeña negra en España: Población reproductora en 2017  y método de censo”

Cuenca del Guadalquivir clave para la especie

Agrupando los emplazamientos de reproducción de cigüeña negra por cuencas hidrográficas, la especie se encuentra ligada prioritariamente a la cuenca del Guadalquivir, donde se encuentra ceca del 45% de la población y casi con igual importancia a la del río Tajo que acumula otro 41% de los efectivos estatales.

Desde la primera estima nacional realizada en 1987, su población se ha incrementado pero ese incremento sí está confirmado que se debe en gran parte a un mejor conocimiento de la misma, especialmente desde la década de 1980 a finales de la de 2000. Pero sí está documentado el aumento de parejas reproductoras en determinadas zonas y regiones en ese periodo. Incluso en dicho periodo en su centro de dispersión (Extremadura) se registraron fluctuaciones importantes. Durante la década de 2000 se registró cierta estabilidad en Extremadura y ya muy ligero aumento en el resto de comunidades. Pero a partir de la década de 2010 se constata un declive en sus poblaciones periféricas (Castilla y León, Madrid y Castilla-La Mancha), estabilidad en Extremadura y ligero aumento en Andalucía.

Lo observado a escala general parece mostrar una situación optimista, con aumento de los efectivos a escala estatal. Esta evolución contrasta con la situación de algunas comunidades. Andalucía y Extremadura tienen una evolución positiva o estable en el número de territorios ocupados y en todo el perímetro de su área de ocupación (Castilla y León, Castilla-La Mancha y Madrid), donde su población es más escasa, muestra un declive en la última década importante.

“Es evidente que hay que seguir realizando el seguimiento de la especie para constatar la evolución de sus efectivos, pero la evolución diferente entre unas áreas y otras (estabilidad en el núcleo principal de la especie y constricción de las poblaciones perimetrales), podría ser determinante de un proceso de declive de cigüeña negra en España en los próximos años”, recuerda Del Moral.