Trabajamos para ampliar el conocimiento, concienciar a la población y evaluar el impacto que tienen las basuras marinas, y en especial los plásticos, sobre las poblaciones de aves pelágicas y costeras.
Entre las acciones que lleva a cabo se encuentra la colocación de una serie de contenedores de basura marina, en el marco del proyecto Life SeaBiL, para que se depositen en ellos toda clase de residuos que hayan sido arrastrados por la marea.
El vertido de pellets provocado por la pérdida de mercancía del buque Toconao que está llegando a las costas atlántica y cantábrica es una muestra más de un problema ambiental que amenaza los ecosistemas. En concreto, los mares y océanos son especialmente sensibles. Según Naciones Unidas, el plástico representa el 85% de los residuos que llegan a los océanos y advierte que, “para 2040, los volúmenes de este material que fluirán hacia el mar casi se triplicarán, con una cantidad anual de entre 23 y 37 millones de toneladas”.
Conscientes de esta realidad, trabajamos desde hace años para concienciar de este problema ambiental y estudiar su impacto en las aves marinas, uno de los grupos de aves más amenazados del mundo. Más de la mitad (57%) de las 365 especies está disminuyendo, y casi un tercio se considera globalmente amenazado, como refleja el informe “El estado de las aves en el mundo” de BirdLife International.
Una de las medidas que la organización está llevando a cabo a través del LIFE Saving SeaBirds from marine Litter (SeaBiL) es la colocación y gestión de unos contenedores de madera de 1x1m, con tapa abatible para poder depositar en ellos objetos tanto grandes como pequeños que haya sido arrastrados por la marea.
SEO/BirdLife ha implementado esta medida en dos de los tres sitios piloto en los que trabaja: Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel (playas de Ris y Trengandín, Noja) y Reserva de la Biosfera de Urdaibai (playa de Laida, Ibarrangelu). Igualmente, la medida también se ha implementado en el Parque Natural de Cabo de Gata-Nijar en las playas del Arco y el Embarcadero, a cargo de la Universidad de Cádiz, socia también del proyecto LIFE.
“El objetivo es que cualquier persona usuaria del arenal que quiera colaborar en mantenerlo limpio, tenga un lugar donde poder depositar los objetos que hayan sido arrastrados por la marea hasta la playa”, declara Ludovico de Vega, técnico de SEO/BirdLife en Cantabria. “Normalmente son restos de cuerdas, redes y elementos de plástico en sus diferentes formas y tamaños. Aunque también pueden aparecer objetos más inverosímiles como neumáticos o electrodomésticos”, añade.
Los contenedores no se instalan de manera permanente en las playas, sino que se temporalizan entre octubre y marzo. Esto se debe a que en dicho periodo es cuando se suceden la mayor parte de los temporales en el océano y es cuando más basuraleza aparece en las playas. Además, se evitan así los periodos de máxima afluencia de turismo, cuando las playas suelen limpiarse de forma mecánica y es más probable que se haga un mal uso de ellos, depositando en su interior cualquier residuo que no haya sido arrastrado por la marea.
Este tipo de infraestructuras son solo para depositar basura y/o elementos no naturales que el mar arrastre y deposite en la playa. “Conviene recalcarlo ya que la pasada temporada gran parte de los residuos acumulados en los contendores fueron basura “ordinaria” no arrastrada por la marea”, apunta Ludovico de Vega. De los 163 kg de basura recogida en los sitios piloto en los que SEO/BirdLife está trabajando, 70 kg fueron de basura marina y los 93 kg restantes fueron de basura ordinaria. “Este hecho no hace más que entorpecer las labores de gestión y manejo de los contenedores, así como el buen desarrollo del proyecto” explica de Vega.
En cuanto a los pellets, la organización informa que no pueden depositarse en contenedores habituales, sino que deben llevarse a un gestor de residuos autorizado, de ahí la importancia de hacerlo en coordinación con las administraciones locales, responsables de la gestión de los residuos.
El uso de este tipo de contenedores lleva años implementado en Francia con muy buenos resultados. Cabe destacar que, al día siguiente de la colocación de los contenedores en Noja, ya se habían utilizado y había redes, boyas y plásticos en su interior, residuos considerados en su mayoría como industriales.
Contenedor para basura marina con el etiquetado bien visible. Autor: SEO/BirdLife
El contenido se revisa cada dos semanas para hacer una caracterización y obtener información sobre qué tipo de basura es la que más comúnmente aparece en las playas y tratar, así, de establecer el origen de la misma.
La organización también ha editado la Guía de limpieza de playas, un manual de buenas prácticas de cara a preservar la biodiversidad presente en los arenales y dunas, un nuevo recurso para informar y garantizar una buena retirada de basuraleza de las playas.
Aves orilladas
Otra de las acciones que SEO/BirdLife está llevando a cabo es la coordinación para la recogida de cadáveres de aves marinas para su posterior necropsia y toma de muestras de órganos y tejidos. Se pretende con ello realizar un estudio del contenido estomacal, así como analizar la existencia de otros contaminantes acumulados en su cuerpo.
Para ello, anima a que cualquier persona pueda hacer ciencia ciudadana a través de la aplicación ICAO (Inspección Costera de Aves Orilladas) que permite realizar un seguimiento puntual o protocolizado de las aves marinas que llegan a la costa. Permite obtener datos sobre su mortalidad y comprender mejor el papel y el impacto de las distintas presiones que sufren las aves marinas en su entorno natural.
Caracterización de basura marina con ICAO. SEO/BirdLife
