Combatiente
Calidris pugnax
El combatiente es una limícola de bastante buen tamaño, difícil de distinguir de otras especies cercanas. Su rasgo más característico consiste en el
vistoso atuendo nupcial que lucen los machos, que se adornan con llamativas golas y penachos cefálicos de plumas, con los que, mediante posturas estereotipadas, danzas y movimientos de alas, se enfrentan a otros machos en interminables combates (de ahí el nombre de la especie) por las hembras.
CAT / Batallaire
GAL / Pilro combatente
EUS / Borrokalaria
ENG / Ruff
Especie abundante y de amplia distribución territorial que, una vez evaluada, se considera fuera de las categorías con mayor grado de amenaza.
Escucha su canto:
Combatiente
Calidris pugnax
Información
Charadriiformes
Scolopacidae
20-30 cm
48-60 cm
Identificación
El combatiente es un ave limícola más bien grande, con el cuello largo, la cabeza pequeña, el pico relativamente corto y las patas no demasiado largas. El macho en plumaje nupcial (dibujo 1 y dibujo 2) presenta un aspecto absolutamente inconfundible, ya que se adorna con una gola de plumas y unos penachos cefálicos de coloración variable (blancos, negruzcos, rayados, vermiculados) según el individuo. Además, adquiere en esa época unas características rugosidades faciales.
La hembra en plumaje nupcial nunca presenta golas ni orejas, si bien las plumas de sus partes superiores muestran dibujos variados. El pecho y los flancos suelen estar moteados de marrón oscuro y su vientre es claro.
Los adultos no reproductores (dibujo 3) presentan un tono gris oscuro, algo más claro en los flancos y el vientre blanquecino, mientras que los juveniles tienen las plumas de las partes superiores muy bien delimitadas por bordes ante y blanco (dibujo 4). La cabeza, el cuello y el pecho son de tonos ante, y las partes inferiores, blancas.
Canto
Es un ave muy silenciosa, que apenas emite unos pocos sonidos de baja intensidad.
Dónde vive
En el mundo
El combatiente es una especie de distribución paleártica, que cría desde la Europa atlántica septentrional hasta el noreste de Asia.
No se reconocen subespecies.
En España
En nuestro país, durante el invierno está presente tanto en humedales costeros como de interior, fundamentalmente arrozales. En el litoral, las mayores concentraciones se dan en el arco atlántico andaluz (particularmente en Doñana). Se extiende además por Extremadura, vega del Guadiana, Toledo y Aragón.
Durante el paso primaveral, las áreas de distribución se solapan en gran medida con las de la invernada, si bien se diversifica, habiéndose observado tanto en Baleares como en Canarias, aunque no hay registros en Ceuta y Melilla. También aparece de forma más habitual en humedales de La Mancha y del norte de Castilla y León.
Para más información sobre su distribución territorial y otros datos de interés, consulta la ficha del combatiente en el III Atlas de las aves en época de reproducción en España.
Más información
Consulta el siguiente enlace para ampliar la información sobre esta especie.
Desplazamientos
El combatiente es un ave migradora que pasa el invierno en África, aunque algunos ejemplares se asientan durante la estación desfavorable en áreas apropiadas del sur de Europa. El paso migratorio posnupcial tiene lugar en agosto por la costa mediterránea y el prenupcial en marzo y abril. En determinadas localidades del interior se detecta un cierto flujo migratorio, que resulta más escaso a lo largo de las costas del Cantábrico y por el estrecho de Gibraltar.
Población
En la Lista Roja Europea de Aves 2021 la población reproductora europea se estima entre 513.000 y 1.380.000 ejemplares maduros, con tendencia decreciente.
Las últimas estimaciones en España, de la primera década del siglo, hablan de unos 1.750 los individuos invernantes, la mayoría de los cuales se concentra en las marismas del Guadalquivir y, en número muy inferior, en el delta del Ebro. No se ha detectado una tendencia poblacional clara para la especie.
Cómo vive
Hábitat
El combatiente se reproduce en zonas árticas y subárticas, pues prefiere climas fríos, aunque no extremadamente húmedos o ventosos. Fuera de la época de cría necesita cierta proximidad entre las áreas de alimentación y descanso, aunque puede realizar desplazamientos de hasta 20 kilómetros entre unas y otras. Prefiere orillas fangosas de lagos, charcas, estanques, ríos y otras masas de agua, así como marismas o parajes inundados, pero no suele frecuentar las zonas mareales.
Alimentación
Basa su dieta en invertebrados, sobre todo insectos y sus larvas, aunque fuera de la estación reproductora la materia vegetal es también importante para la especie. Suele vadear en aguas poco profundas y sondear con su pico en el sedimento, si bien también recoge insectos de la superficie y sobre la vegetación.
Reproducción
El ciclo reproductor del combatiente abarca unos 50 días, de los que 20-23 están dedicados a la incubación y el resto se invierten en el desarrollo de los pollos, que son muy precoces y pueden desplazarse al poco de nacer.
La reproducción suele iniciarse a finales de abril con llamativos enfrentamientos entre los machos y se completa a finales de agosto.
El nido se sitúa en el suelo, oculto entre la vegetación, y consiste en una pequeña depresión forrada con hierba, hojas y tallos. Estas aves suelen criar en solitario, aunque no es raro que varias hembras aniden bastante próximas entre sí en las inmediaciones de los lugares donde acontecen los despliegues nupciales de los machos.
La puesta suele ser de cuatro huevos de color verdoso y suavemente moteados, que son empollados por la hembra.
Meses en los que se puede ver la especie en España
Amenazas y conservación
Especie abundante y de amplia distribución territorial que, una vez evaluada, se considera fuera de las categorías con mayor grado de amenaza.
El combatiente está incluido como especie Invernante/Migratoria en la Lista Roja de las Aves de España, con la categoría de LC – Preocupación Menor.
También figura en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. Sin embargo, no está incluido en el Catálogo Español de Especies Amenazadas.
La principal amenaza a la que se ve sometido el combatiente es la caza ilegal en los periodos de migración y durante la invernada. También le afecta la destrucción del hábitat provocada por desecaciones de zonas húmedas y un desarrollo industrial incontrolado.