Hoy se celebra en Santander la reunión del Consejo Regional de Caza de Cantabria en la que SEO/BirdLife es miembro en representación de las organizaciones conservacionistas. En esta sesión se dará informe de la propuesta de orden de vedas que regirá durante la temporada de caza 2015/2016. En esta sesión SEO/BirdLife solicitará formalmente que se excluyan de la caza la codorniz y la tórtola europea, esta última declarada Ave del Año 2015, debido a la grave situación de ambas en toda Europa. También se pedirá que se excluyan de la lista de especies “cazables” otras especies de aves debido a su escaso interés cinegético como la gaviota patiamarilla y que además está en declive, como la avefría.
La propuesta de Orden de Vedas de Cantabria, y que se presenta hoy en el Consejo Regional de Caza, excluye de las especies cinegéticas para la temporada de 2015/2016 a la tórtola europea pero no a la codorniz común.
Para SEO/BirdLife la decisión de excluir de la caza a la tórtola europea es una “buena noticia” que muestra que el Gobierno de Cantabria, como responsable de la conservación de las especies silvestres, ha asumido lo que dice la comunidad científica sobre el preocupante estado de conservación de esta especie a escala nacional e internacional cumpliendo de este modo con la normativa europea y la legislación española. No debemos olvidar que es una especie migratoria y por tanto los esfuerzos de conservación deben incluir la totalidad de su área de distribución.
La codorniz común también debería dejar de cazarse
Con los datos científicos disponibles, que indican un paulatino y continuo declive de las poblaciones de estas especies en España y un alarmante descenso en Europa, y de acuerdo a la Ley de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, que en su artículo 62 prevé que el ejercicio de la caza se regule de modo que queden garantizados la conservación y fomento de las especies cinegéticas, el Gobierno de Cantabria debería mostrar nuevamente una gran responsabilidad tomando la decisión de no permitir la caza de la codorniz en todo el territorio de Cantabria para contribuir a mejorar su estado de conservación a largo plazo.
Los resultados del Programa de Seguimiento de Aves Comunes (Sacre), cuya metodología estandarizada está ampliamente aceptada y que se lleva a cabo en numerosos países europeos, son utilizados por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente desde el año 2005 hasta la actualidad como un indicador ambiental relevante y aceptado oficialmente. Los datos científicos con que cuenta este indicador hasta ahora corresponden a las tendencias observadas a través de los seguimientos de aves comunes reproductoras realizados cada primavera por SEO/BirdLife entre 1998-2013.
De acuerdo con los datos del Programa Sacre, a nivel nacional, ambas especies, están sufriendo un declive continuado, del 30% en el caso de la tórtola europea y de 62% en el caso de la codorniz, lo que representa una importante tendencia negativa de sus poblaciones para el periodo 1998-2013, que se consolida y aumenta ya que para el periodo 1998-2012 el declive para la tórtola era del 29% y para la codorniz del 52%
SEO/BirdLife pone de manifiesto que estas circunstancias obligan a tomar medidas para proteger y conservar estas especies, y entre ellas a que la caza no comprometa los esfuerzos de conservación realizados en toda su área de distribución, ya que no hay que olvidar que se trata de especies migratorias, que forman parte del patrimonio natural de muchos países.
Sacre en Cantabria
Para suplir la ausencia de información a escala regional, el Programa Sacre va a comenzar a llevarse a cabo de forma regular en Cantabria a partir de esta temporada de cría de 2015, gracias al apoyo del Gobierno de Cantabria a través de la Dirección General de Montes, pero será necesario un mínimo de cuatro años continuos de seguimiento para obtener los primeros resultados exhaustivos y al mismo tiempo comparables con los del resto del territorio nacional. De momento, en esta primera temporada se prestará especial atención a los ambientes agrícolas de Cantabria y a las poblaciones de codorniz, triguero y alcaudón dorsirrojo, si bien se espera aumentar esta cobertura en los próximos años, considerando otros ambientes del resto de la región.
Para SEO/BirdLife, la gestión de la caza en Cantabria requiere del apoyo y colaboración conjunta de todos los grupos e instituciones relacionadas con el estudio, conservación y manejo de estas especies, como son cazadores, científicos, grupos conservacionistas, etc. Deben ponerse en marcha medidas eficaces para el seguimiento de las especies, y en esta línea se encuentra el Programa Sacre. Sin embargo, resulta imprescindible llevar a cabo acciones para mantener en buen estado de conservación de los ambientes agrícolas donde viven estas aves, y de ese modo garantizar la recuperación de sus poblaciones. Para SEO/BirdLife, este tipo de actuaciones deben iniciarse cuanto antes para conseguir que dichas recuperaciones tengan éxito.
En lo que se refiere a la codorniz común, la tendencia de las poblaciones en Cantabria se considera negativa, debido sobre todo a la pérdida y a la destrucción y alteración del hábitat, en especial el abandono de áreas cultivadas adecuadas para esta especie. Además, los cambios en los sistemas tradicionales agrícolas y ganaderos han contribuido a reducir su área de ocupación. A ello hay que unir el empleo de sustancias tóxicas en la agricultura intensiva y la caza en época de reproducción como es la media veda. En la actualidad, los principales efectivos de esta especie se encuentran en los pastizales abiertos y cultivos de los valles del sur de Cantabria, en particular los valles de Campoo, Valdeolea y Valderredible.
Imprescindible un plan de gestión del lobo
Con respecto a la posibilidad de la caza del lobo reflejada en la orden de vedas, en actualidad abatir un lobo requiere desde el año 2014 la autorización previa de la Dirección General de Montes, lo cual es un avance frente al modelo de caza indiscriminada que existía anteriormente. Por otra parte, desde las organizaciones conservacionistas y ecologistas se ha demandado que, antes de conceder cualquier tipo de autorización excepcional se evalúe mediante criterios técnicos y científicos objetivos. Además es necesario que se la implementen medidas preventivas adecuadas para evitar ataques, para proteger al ganado y para reducir el conflicto entre los lobos y los ganaderos mediante el pago ágil de los daños. Por este motivo debe aprobarse cuanto antes un Plan de Gestión del Lobo que garantice soluciones a los posibles conflictos.