España cuenta con el 90% de la población europea y cerca del 10% de la población mundial de buitre leonado y nuestro país tiene una gran responsabilidad en su conservación.
La población reproductora de buitre leonado en España en la actualidad es de 31.000-37.000 parejas y el número de ejemplares podría estar entre los 95.000 y los 122.000, según el último censo realizado por SEO/BirdLife y publicado hoy “El buitre leonado en España. Población y método de censo”
En 2018 SEO/BirdLife realizó el V censo nacional de una de las especies mejor seguidas de nuestra avifauna, el buitre leonado. Han pasado 40 años desde que se cuantificó la población de esta especie por primera vez. Desde entonces, cada diez años, SEO/BirdLife promueve el censo de esta y otras especies en las condiciones que permiten cada momento, condiciones que han ido cambiando mucho con el tiempo. En esta ocasión presentamos la Monografía nº 50 previo al Día Internacional de los Buitres (7 de septiembre).
La iniciativa de realizar el primer censo nacional de buitre leonado se remonta a 1978 y así figura en las actas de la organización. Fue en la Asamblea General Ordinaria efectuada el día 10 de junio de 1978, en la que Eduardo de Juana, como vocal de la Junta Directiva, propuso a los socios la realización de un primer censo nacional de colonias de buitre leonado.
Esta acción fue una de las precursoras de la gran participación y fidelidad de miles de personas de las que goza nuestra organización actualmente y que hoy conocemos como Ciencia Ciudadana.
Primer censo con voluntarios
Aquel primer censo se realizó en 1979 y se volvió a repetir justo una década después, en 1989. Posteriormente, con el objetivo de hacer coincidir un nuevo censo de la especie con el de otras rupícolas, SEO/BirdLife adelantó a 1998 el tercer censo nacional de buitre leonado. Desde entonces se han repetido cada 10 años, en 2008 y 2018, también coincidiendo con otras rapaces rupícolas (alimoche, águila perdicera, águila real, águila pescadora y halcón peregrino y tagarote).
Los primeros censos fueron realizados de forma totalmente altruista por los miembros de SEO/BirdLife, el de 1979 se desarrolló con el esfuerzo de 130 personas, repartidas en 24 grupos regionales, y los resultados fueron alentadores: detectaron al menos 3.240 parejas, pues las cifras de estimas previas hacían presagiar una situación mucho más negativa; Francisco Bernis y José Antonio Valverde estimaron entre 5.000 y 8.000 ejemplares repartidos en 140 colonias en 1958.
En el censo de 2018 la implicación de la administración, a través de los servicios de medio ambiente de las comunidades autónomas, ha sido muy grande y, aunque se ha contado con mucha colaboración de voluntarios de SEO/BirdLife, el censo ha sido prácticamente completo gracias a esa implicación autonómica.
Situación actual
Los resultados reflejan una situación un tanto fuera de lo normal frente a la de otras especies de buitres y frente al estado de las aves carroñeras en otros países. La población de buitre leonado en España actualmente se encuentra entre 30.946-37.134 parejas. Si se mantuviera en la actualidad la proporción de población reproductora frente a la no reproductora calculada en anteriores ocasiones para obtener el número de individuos, el número de ejemplares de buitre leonado en España en la actualidad podría estar cercano a los 95.930-122.542 ejemplares.
Esta población se distribuye por 2.544 colonias y 533 parejas que crían de forma aislada. Sirva de comparativa frente a esta población la de las otras 14 especies de buitres que habitan el Viejo Mundo, entre las que ocho se consideran ya “críticamente amenazadas” a nivel mundial, tres “en peligro” y el resto “casi amenazadas”.
Principales amenazas
La principal causa de mortalidad de la especie actualmente son las colisiones, principalmente con aerogeneradores y con infraestructuras eléctricas, seguida de la desnutrición que sufren muchos ejemplares, especialmente ejemplares jóvenes que se encuentran en dispersión. Otra causa nada despreciable de mortalidad suponen los cebos envenenados en el medio natural y las electrocuciones en tendidos eléctricos.
No hay que olvidar que “España cuenta con el 90% de la población europea y cerca del 10% de la población mundial de buitre leonado y nuestro país tiene una gran responsabilidad en su conservación. Pero las cuatro especies de buitres que habitan aquí están gravemente amenazadas por el diclofenaco”, asegura Asunción Ruiz, directora ejecutiva de SEO/BirdLife. “Un fármaco de uso veterinario mortal para estas rapaces que lamentablemente está autorizado en España con el consiguiente riesgo para los buitres que consumen carroñas de animales tratados con este potente químico. Un claro ejemplo de que la defensa de nuestro patrimonio natural está de capa caída. Es cierto que nunca ha sido una prioridad pero quizás esta preocupante desidia debería alarmarnos. Necesitamos biodiversidad para combatir los efectos del cambio climático. Por este motivo en SEO/BirdLife no dejamos de pedir “Ni un grado más, ni una especie menos”, apunta Ruiz.
“Desde SEO/BirdLife queremos destacar que todavía las comunidades autónomas de Madrid, Galicia, Baleares y Murcia no tienen una normativa autonómica que se adapte al Real Decreto 1632/2011 para autorizar el depósito de cadáveres de ganado en el campo y solicitamos que se apruebe urgentemente”, concluye Ruiz.
Además, el buitre leonado es víctima del uso ilegal de cebos envenenados. Entre 1993 y 2017 se localizaron 931 ejemplares muertos por envenenamiento intencional. Burgos con 128 hallazgos, seguidas de Segovia (79), Málaga (51), Soria (45), Zaragoza (43) y Asturias (39), son las provincias donde se ha registrado una mayor incidencia en el uso de veneno. Estos datos reflejan únicamente los casos localizados, siendo el número real de aves muertas muy superior
¿Dónde se encuentran los buitres en España?
Son 43 provincias las que acogen actualmente población reproductora de buitre leonado (41 en el censo de 2008) y entre ellas Navarra, Cádiz, Guadalajara, Burgos y Cáceres superan las 2.000 parejas. Otras nueve provincias superan las 1.000 parejas (Segovia, Zaragoza, Huesca, Teruel, Salamanca, Lleida, La Rioja, Cuenca y Soria); estas 14 provincias acumulan el 79% de la población reproductora. Se detectó población reproductora por primera vez en Islas Baleares y Valencia y permanece sin efectivos reproductores Galicia y Canarias. Tampoco se reproduce en Huelva, Ceuta y Melilla.
“Aunque se sigue obteniendo una tendencia positiva de la población en la última década, ese crecimiento es cada vez menos pronunciado”, apunta Juan Carlos del Moral, coordinador del Área de Ciencia Ciudadana de SEO/BirdLife. Se han detectado 5.407 parejas más que en el censo anterior (2008), lo que supone un crecimiento de un 17,5-26% en los últimos diez años (29,3% en 1998-2018, 55,4% en 1988-2008 y 48,2% en 1978-1988). Descienden los valores de los parámetros reproductivos pero no lo suficiente como para hacer que el número de pollos volados también disminuya cada año, ya que parámetros relativamente más bajos con población notablemente mayor hace generar un número de pollos cada año más elevada todavía. Así, el declive de parámetros aún no implica la amenaza que sí implica la elevada mortalidad de ejemplares; “aunque no se tienen cifras exactas, se sabe que en la última década murieron miles de ejemplares en los parques eólicos, por ejemplo”, concluye del Moral.
Alimoche, quebrantahuesos y buitre negro
Entre 2017 y 2018 también fueron censadas en España el resto de especies de buitres. El buitre negro en 2017 cuenta con 43 colonias y 6 parejas aisladas, sumando hasta 2.544 parejas. Estimamos una población de 2.544-3.140 parejas. Se distribuyen en 7 comunidades autónomas y 14 provincias. El área de reproducción del buitre negro se limita al suroeste de la Península Ibérica y al norte de las Islas Baleares, como hasta hace muy poco, pero el trabajo de reintroducción de la especie en Cataluña ha sido exitoso y hay un nuevo y pequeño punto de reproducción en Lleida. Hay estimaciones de la población desde la década de 1970, éstas reflejan un aumento constante desde el principio. En los últimos años (2006-2017), el aumento a nivel nacional es del 30,57%.
La población de alimoche en España en 2018 es de 1.490-1.567 parejas. La tendencia general es ligeramente positiva con respecto al censo nacional anterior. Se han detectado 38 nuevos territorios seguros en comparación con 2008 (aumento del 3%) y solo 11 más si la comparación se considera territorios probables y seguros. En la década anterior (1998-2008) hubo un aumento del 10%. En esta situación, podríamos hablar de un aumento muy leve y posiblemente constante en las últimas décadas, pero que tiende a estancarse a escala estatal. A pesar de este aumento general, es importante tener en cuenta que hubo una disminución en 17 provincias, estable en otras 16 y en los 17 restantes la población ha aumentado.
Por otra parte, desde la desaparición del quebrantahuesos en Andalucía en 1986, la población quedó relegada a los Pirineos; siendo, en la actualidad, la única población silvestre de la especie en la Europa sudoccidental. El quebrantahuesos ha mantenido una tendencia creciente en el número de unidades territoriales, desde que se comenzó con los seguimientos poblacionales en la década de los 80 del pasado siglo.
Si bien, en los últimos cinco años, se ha observado una clara ralentización del crecimiento. Si en el año 2014, en la vertiente meridional del Pirineo, los territorios probables y seguros eran: 137 y 122, respectivamente, llegando a volar 30 pollos, durante 2018, el número de territorios probables fue de 141, mientras que los seguros llegaron a 125, con un total de 37 pollos volados. Andalucía, Asturias y el Maestrazgo de Teruel y Castellón, junto a los Ports de Tortosa Besseit (Cataluña), están desarrollando proyectos de reintroducción de la especie. Así, a la población pirenaica hay que sumar los dos territorios de Andalucía en 2018 y el establecimiento de un territorio en Asturias, formado por una hembra reintroducida y un ejemplar silvestre.