El juzgado de lo Penal nº1 de Arrecife, en Canarias, ha condenado a 10 personas como autores de un delito contra la fauna por cazar pardelas cenicientas en el islote de Alegranza, dentro del Parque Natural del Archipiélago Chinijo.
SEO/BirdLife lleva años denunciando esta práctica ilegal que se ha venido ejerciendo entre los meses de septiembre y octubre, coincidiendo con el engorde de los pollos nacidos durante el verano.
El Juzgado de lo Penal Número 1 de Arrecife ha condenado a 10 de los 19 investigados por un delito contra la fauna al haber sido sorprendidos cazando y cocinando pardelas cenicientas (Calonectris borealis) en septiembre de 2015. Los hechos se produjeron en el islote de Alegranza, dentro del Espacio Natural Protegido del Parque Natural Archipiélago de Chinijo e incluido en la Zona de Especial Protección para las Aves “Islotes del norte de Lanzarote y Famara”. El tribunal ha impuesto a los autores la mayor multa posible para este tipo de delito, teniendo que abonar 8.640 €, pagar las costas del proceso y quedando además inhabilitados tres años para la caza o el ejercicio de cualquier profesión relacionada con la misma.
Además de esta sentencia en la vía penal, tres de los investigados tendrán que responder en la vía administrativa, pues solicitaron permiso para fondear en la playa donde se produjeron los hechos, permiso en el que figuraba la prohibición de perturbar o cazar pardelas.
SEO/BirdLife y otras asociaciones como Amigos de las Pardelas (personada, además, como acusación particular en este juicio) lleva varios años denunciando la caza ilegal de esta especie incluida en el Catalogo Español de Especies Amenazadas con la categoría de vulnerable, en el Anexo I de la Directivas Aves y también considerada vulnerable en el Libro Rojo de las Aves de España. Además, está protegida por el Convenio para la Conservación de la Vida Silvestre y del Medio Natural de Europa (Convenio de Berna), que la recoge en su anexo II, dedicado a especies de fauna estrictamente protegidas.
Una práctica ilegal
En el pasado el expolio de los nidos de pardela cenicienta fue una práctica muy común en las islas Canarias, dónde la carne de los pollos era muy apreciada por su gran cantidad de grasa y por tratarse de un recurso alimenticio de fácil acceso en épocas de escasez.
Hoy en día la pardela cenicienta es un ave protegida y su caza está totalmente prohibida. A la práctica del pardeleo hay que sumar las amenazas que afectan a la especie, como la presencia de gatos, ratas y otros mamíferos introducidos que depredan en sus colonias de cría, la contaminación lumínica y las capturas accidentales en artes de pesca.
Reconocimiento de la labor de la Sargento Gloria Moreno
SEO/BirdLife reconoce el gran trabajo de la Sargento de la Guardia Civil, Gloria Moreno, cuya persistencia en la persecución de este caso ha llevado a la condena de los autores de este delito contra la fauna. SEO/BirdLife desarrolla precisamente junto con el Seprona de la Guardia Civil el proyecto LIFE Guardianes de la Naturaleza, financiado por el programa Life de la Unión Europea, que pretende mejorar la efectividad y la eficacia de las acciones dirigidas a combatir los delitos contra la naturaleza.
Este proyecto está coordinado por SEO/BirdLife y cuenta con la participación de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, la Sociedade Portuguesa para o Estudo das Aves (SPEA), y el Servicio de protección de la naturaleza de la Dirección general de la Guardia Civil (SEPRONA), como socios beneficiarios. Los cofinanciadores son la Dirección General de Protección de la Naturaleza del Gobierno de Canarias, la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural de la Generalitat Valenciana y el Ministerio para la Transición ecológica (MITECO).