Las iglesias y catedrales no solo encierran bienes culturales de inestimable valor. Entre sus vetustas piedras cría una pequeña ave rapaz que forma parte del paisaje monumental de nuestros pueblos y ciudades y que, como ocurre con los bienes culturales, tenemos la obligación de conservar: el cernícalo primilla.

 

Pareja de cernícalo primilla en un tejado © Tatavasco Images

Pareja de cernícalo primilla en un tejado © Tatavasco Images

 

 

Habitante de las ciudades

Esta rapaz tan cercana al ser humano pasa el invierno en África y vuelve en primavera para criar en nuestra tierra. Más del 60% de las parejas reproductoras lo hacen en ambientes urbanos, utilizando casi siempre edificios histórico-artísticos. Una vecindad secular que se vio seriamente comprometida cuando, a partir de los años 60 los cernícalos primilla comenzaron a desaparecer de nuestros pueblos y ciudades. En los 80, la preocupación por la desaparición de esta especie, catalogada como “amenazada de extinción”, dio lugar a que los investigadores abordaran el declive poblacional de la especie, que la Administración ambiental se implicara en su conservación y que desde la sociedad civil se pusieran en marcha iniciativas para devolver al cernícalo primilla a lugares donde había desaparecido.

 

Gracias a estos esfuerzos se ha podido frenar el declive y, aunque la población actual solo es una sombra de lo que fue, aún es posible disfrutar de su presencia en numerosas ciudades andaluzas. Algo que no hubiese sido posible sin la colaboración entre los responsables de velar por el patrimonio cultural y natural. No en vano, las obras de conservación y restauración del patrimonio cultural no solo no suponen ningún problema para la conservación de esta especie, sino que pueden favorecer su conservación si se realizan adecuadamente.

 

Cernícalo primilla posando sobre un tejado ©Tatavasco Images

Cernícalo primilla posando sobre un tejado ©Tatavasco Images

 Para ello solo es preciso atender a una serie de condicionantes y actuaciones muy sencillas. Así ocurrió, por ejemplo, en la Iglesia de El Salvador, en Sevilla, en donde, gracias a la colaboración del Arzobispado y la Consejería de Medio Ambiente, las obras de restauración de su cubierta en 2009 propiciaron que el número de parejas de cernícalos primilla que criaban en ella se duplicara.

 

 

 

Actividades por el Día del Medio Ambiente

De esta relación entre iglesias, catedrales y primillas hablará el martes 3 de junio, a las 19:30 horas José Antolín, presidente del grupo conservacionista DEMA, en el salón de actos de la Casa de la Ciencia (Avda. de Maria Luisa s/n. Pabellón del Perú), en el marco del ciclo de conferencias “los martes ornitológicos” que el grupo local SEO-Sevilla organiza en la Casa de la Ciencia de la ciudad hispalense.

 

La segunda actividad tendrá lugar el día 5 de junio y consistirá en la VI edición de “Aves en Vivo y en Directo” organizado también por el grupo local de SEO/BirdLife en Sevilla. Cernícalos de la Catedral de Sevilla, es el emblema de esta actividad, que permitirá a los ciudadanos acercarse a conocer en directo la colonia de primillas que habitan los mechinales y tejados de la Catedral de Sevilla y contemplar su continuo ir y venir para sacar adelante a sus pollos. Para ello se cuenta con material óptico de gran calidad y monitores de SEO/BirdLife. El punto de observación se ubicará en el lateral del Archivo de Indias, en la calle Fray Ceferino González de 18:00 a 22:00 horas.

 

Actividadad de observación de cernícalos primilla frente a la catedral de Sevilla organizada por SEO/BirdLife para todos los ciudadanos ©SEO/BirdLife

Actividad de observación de cernícalos primilla frente a la catedral de Sevilla, organizada por SEO/BirdLife para todos los ciudadanos ©SEO/BirdLife

 

Con estos actos, SEO/BirdLife quiere llamar la atención de la ciudadanía para que comprendan que tan necesario es cuidar el patrimonio cultural como el natural, y que es difícil imaginar el pórtico de una catedral sin vuelos ni cantos de las aves. En este sentido, el cernícalo primilla es un perfecto “embajador” en nuestros pueblos y ciudades del resto de especies amenazadas de Andalucía y de otras que van camino de estarlo, como ocurre con la golondrina, otra ave vecina que ha sufrido un declive que SEO/BirdLife ha estimado en más del 30% en los últimos 10 años, una delicada situación que ha hecho que haya sido designada por esta organización como Ave del Año 2014.

 

“Todo el mundo debe ser consciente de nuestra responsabilidad para preservar nuestro patrimonio natural. Un modo sencillo de dar el primer paso es comenzar a preocuparse por el futuro de las aves urbanas, de nuestras aves vecinas, cuya cercanía nos recuerda que su futuro está literalmente en nuestras manos”, ha recordado José Eugenio Gutiérrez, Delegado de SEO/BirdLife en Andalucía.

 

 

 

 

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