Su relación simbiótica puede tener consecuencias negativas cuando los artes de pesca actúan como trampas mortales accidentales

Cormorán moñudo mediterráneo ©J.M.Arcos-SEO/BirdLife

 

Aves marinas y pescadores conviven largas horas en alta mar, interaccionando de múltiples formas. SEO/BirdLife trabaja a través de su Programa Marino para resaltar esta relación y procurar que sea lo más armoniosa posible.

Las aves

Las aves marinas viven estrechamente ligadas a los océanos, donde juegan el rol de depredadores. Sus adaptaciones son diversas: algunas han desarrollado una gran capacidad de buceo, para acceder a un mayor abanico de presas; otras apenas se sumergen, pero pueden recorrer miles de kilómetros en busca del escaso alimento que queda a su alcance, en superficie. Por su vistosidad, a menudo actúan como especies bandera, de forma que su conservación ayuda a proteger a otras especies menos visibles y sus hábitats.

Sus amenazas 

Pardela cenicienta enganchada en línea de palangre (©Vero Cortés-SEO/BirdLife) y alcatraz atlántico muerto, con un resto de red en el pico ©Andrew Balcombe/Shutterstock

 

Las marinas son las aves más amenazadas del planeta. Se estima que su abundancia ha caído un 70% en los últimos 60 años, y siguen en declive. Se enfrentan a peligros muy diversos, como la introducción de especies invasoras, el desarrollo urbanístico e industrial, la contaminación, el cambio climático o los impactos de la pesca: sobreexplotación y capturas accidentales. Estas últimas,, producidas en artes de pesca como palangres o trasmallos, entre otras, causan cientos de miles de muertes al año, y representan uno de los motivos principales de su descenso.

 

Pardelas cenicientas y balear capturadas por palangres ©J.M. Arcos-SEO/BirdLife

 

Los pescadores

Muchos pescadores tienen a las aves marinas en gran estima, pues los acompañan a lo largo de sus largas y fatigosas jornadas en el mar, y a menudo les ayudan a localizar sus presas. A su vez, las aves también pueden beneficiarse de la pesca, especialmente aprovechando los descartes. Pero la interacción entre aves y pescadores también puede tener consecuencias negativas para ambos, cuando los artes actúan como trampas mortales para las primeras, y las convierten en capturas que nadie desea.

Pescadoress izando una red de arrastre ©David Tarrasón

Pesca de cerco, dirigida a la captura de pequeños peces pelágicos como la sardina y el boquerón ©David Tarrasón

 

Nuestro trabajo

SEO/BirdLife, junto a BirdLife International, trabaja desde hace años para entender y buscar soluciones al problema de las capturas accidentales de aves marinas.Y para ello, nada mejor que aunar esfuerzos y buscar la participación de los pescadores, y poner conocimientos y experiencias en común para buscar las soluciones más efectivas y valoradas por todos.

Marcaje de pardela cenicienta en las islas Columbretes ©J.M. Arcos-SEO/BirdLife

Pescador con una pardela mediterránea capturada accidentalmente, rescatada y marcada con emisor vía satélite ©J.M. Arcos-SEO/BirdLife

 

Proyectos SEO/BirdLife

Son muchos los proyectos en los que ha participado SEO/BirdLife para abordar el problema de las capturas accidentales. Actualmente destacan Zepamar (precedido por Zepamed), del  Programa Pleamar de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, y cofinanciado por el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP); un proyecto destinado al desarrollo de medidas de mitigación en el Mediterráneo, realizado con ayuda del Acuerdo Internacional para la Conservación de los Albatros y Petreles (ACAP); el proyecto Life IP Intemares, y el denominado Aves y Gobernanza Pesquera, financiado por la Fundación MAVA y coordinado por BirdLife International.

Este reportaje gráfico ha salido publicado en el último número de la revista «Aves y naturaleza», de SEO/BirdLife

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