43 expertos de 22 nacionalidades están analizando las principales amenazas que acercan a las especies de buitre a la extinción. La ciudad de Toledo acoge la reunión del Plan de Acción sobre el Buitre de la Convención sobre la conservación de las especies migratorias de animales silvestres (CMS), un encuentro clave para la especie y preparatoria de la cumbre internacional de la CMS, que se celebrará en octubre de este año en Filipinas.
La CMS, también conocida como Convenio de Bonn, es un tratado internacional bajo los auspicios del Programa de las Naciones Unidas. Ofrece una plataforma global para la conservación y el uso sostenible de especies migratorias y de sus hábitats. La CMS reúne a más de 120 Estados, entre ellos España y el resto de países de la Unión Europea, y establece las bases legales para medidas de conservación coordinadas internacionalmente para la conservación de especies migratorias.
La situación de los buitres es alarmante: un estudio publicado en Biological Conservation apunta a que sus poblaciones son las que más rápido han descendido en la última década. De las 22 especies conocidas, nueve de ellas están ya en peligro crítico –cuatro de ellas en África–, otras tres están en peligro –todas ellas africanas– y otras cuatro en situación próxima a la amenaza. Solo seis especies se encuentran en un estado de conservación aceptable. En España, que acoge al 90% de los buitres de Europa, solo el buitre leonado cuenta con poblaciones suficientes para considerar que se encuentra fuera de peligro.
El veneno ilegal, a debate
A partir del próximo lunes, 20 de febrero, el encuentro de la CMS cede el testigo a la reunión del Grupo de Trabajo para la Prevención del Envenenamiento. En este caso, 38 expertos de 16 nacionalidades analizarán esta problemática a nivel mundial y determinarán los pasos precisos para que los 120 Estados firmantes de la CMS apliquen la resolución 11.15, aprobada por las partes en Quito en 2014, y que deberían servir para eliminar el uso de veneno como una de las principales amenazas para las aves.
La administración castellanomanchega fue de las primeras en este país en aprobar un Plan de Lucha contra el uso legal del veneno en el medio natural en el año 2005 que ha dado significativos resultados ante esta seria amenaza contra la fauna silvestre y amenazada.
La Junta de Castilla-La Mancha y SEO/BirdLife son las entidades anfitrionas de sendos encuentros que se celebran en la capital castellanomanchega como corazón de una de las regiones europeas más importantes para estas especies necrófagas y donde ambas entidades están llevando a cabo grandes esfuerzos de conservación.