Se repiten todos los años y también acaban ardiendo linderos de vegetación natural, bosques de ribera, zonas reforestadas e incluso dehesas. En las Vegas del Guadiana, estas quemas pueden estar contribuyendo a una tendencia negativa de la población invernante de grullas. Miles de hectáreas arden cada año, pese a estar prohibido por la condicionalidad de la PAC, al ser considerada en toda Europa como una mala práctica agraria que empobrece los suelos y además deja sin alimento a las aves migratorias
Las organizaciones SEO/BirdLife, Adenex, Ecologistas en Acción y Sociedad Zoológica de Extremadura exigen a la Junta de Extremadura y a las organizaciones profesionales agrarias a que tomen medidas contundentes contra estas prácticas y que las condenen públicamente.
El Decreto que regula las buenas condiciones agrarias y ambientales que deben cumplir los agricultores para cobrar las ayudas de la PAC, no admite interpretación. Las quemas de rastrojos están prohibidas salvo por motivos sanitarios verificados por la administración. Pese a ello y ante la aparente inactividad de la Administración y la indiferencia de las organizaciones profesionales agrarias, miles de agricultores extremeños vienen quemando cada año sus campos, produciendo daños ambientales, empobrecimiento de suelos agrarios, así como molestias y problemas de salud en muchos pueblos literalmente cercados por estos malos humos.
VIII Edición del Festival de las Grullas
A pocos días de celebrarse la VIII Edición del Festival de las Grullas de Extremadura, el sector del turismo ornitológico se resiente por la creciente quema de estos rastrojos y su efecto negativo sobre las aves migratorias. Son ya varios casos de guías profesionales nacionales y extranjeros que están colgando en redes sociales fotos de incendios y humaredas, acompañadas de desoladores comentarios de impotencia. Por otra parte, los censos de grullas invernantes parecen mostrar una tendencia negativa en las Vegas del Guadiana, quizá motivada entre otras causas, por estas quemas de rastrojos de arroz y maíz, su principal recurso alimenticio en esta zona.
Ante esta situación, las asociaciones de protección del medio ambiente operativas en Extremadura han solicitado medidas a la Consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio en el Consejo Asesor de Medio Ambiente celebrado el pasado 16 de noviembre, e instaron a las asociaciones profesionales agrarias presentes en el citado órgano (ASAJA, APAG y UPA) a que colaboren en la solución del problema exigiendo a sus asociados que cumplan las normas de la PAC y no quemen rastrojos sin autorización.