En condiciones normales, el agua que anega L’Albufera de Valencia apenas alcanza el metro de altura. Que se pierdan centímetros hace saltar las alarmas, sobre todo cuando no se sabe con certeza cuánta agua ha desparecido y dónde ha acabado. Esto es lo que está pasando en la actualidad en el humedal. 

Ante la alarmante pérdida de agua en L’Albufera de Valencia,  SEO/BirdLife urge a todas las administraciones competentes  a abandonar la irresponsable posición de señalar a otro como culpable. La ONG ambiental reclama asimismo que se convoque el Plan Especial de L’Albufera, según se establece en la normativa del Plan Hidrológico del Júcar, donde todos los agentes se coordinen y compartan la información para alcanzar el objetivo común: lograr un buen estado ecológico y de conservación de uno de los humedales más importantes de la región mediterránea.

La organización ecologista considera imprescindible que la información y decisiones aportadas y adoptadas en este marco se hagan públicas y que, especialmente, se establezcan claramente  las causas del bajo nivel de agua que sufre L’Albufera para que esta situación no se repita.

Avefría en L'Albufera de Valencia - Crédito: Pablo Vera

Avefría en L’Albufera de Valencia – Crédito: Pablo Vera

“Resulta increíble que desde la sociedad civil nos veamos obligados a reclamar transparencia a las administraciones sobre el auténtico estado de L’Albufera. La opacidad en la gestión actual es palpable, especialmente ante las decisiones finales de la Junta de Desagüe”, señala el delegado de SEO/BirdLife en la Comunitat Valenciana, Mario Giménez, quien también solicita que las entidades ambientales y usuarios puedan participar en todos los procesos de decisión relacionados con la gestión del agua en el humedal.

Según la ONG, el balance hídrico y la hidrodinámica del lago de L’Albufera deben ajustarse al cumplimiento de las normativas europeas sobre la conservación y el agua, y al de los convenios internacionales como el de Ramsar. Como mínimo, se han de asumir el principio de no deterioro establecido por la Directiva Marco del Agua y el principio de precaución contemplado en el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea.

Crédito: Pablo Vera

Información actualizada

«Es  necesario contar con información contrastada y actualizada sobre las variaciones del volumen de agua en cada momento, así como de un informe sobre las necesidades hídricas para que el humedal funcione de forma correcta. De lo contrario, se está poniendo en riesgo el camino establecido para alcanzar el buen potencial ecológico del lago”, indica el responsable de Aguas de SEO/BirdLife, Roberto González.

Y añade: “No se puede relajar el nivel de exigencia sobre las necesidades hídricas de L’Albufera. Además, es imprescindible y urgente que la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural del Gobierno valenciano, apruebe de forma participativa el Plan de Gestión para los espacios de la Red Natura 2000 de L’Albufera. Un plan que ha de cumplir con la normativa europea en materia de conservación de espacios protegidos”. En concreto, debe incluir las necesidades hídricas del parque natural y establecer normas de gestión de los caudales. 

«Las decisiones en materia de gestión del agua en L’Albufera no pueden estar sólo en las manos de los regantes y la Consellería debe asumir sus responsabilidades», afirma Mario Giménez.

En los próximos días, SEO/BirdLife trasladará todos estos requerimientos al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, a través de su Dirección General del Agua, y comunicará su preocupación respecto a los posibles incumplimientos legales de la actual situación, que puede contravenir tanto la regulación europea e internacional como la del propio Plan de Cuenca.

 

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