Es una gran noticia que Valencia haya recibido la acreditación de «Ciudad de Humedal» de la Convención Relativa a los humedales de importancia internacional, conocida como Convenio de Ramsar.
Esta distinción se otorga a ciudades que alojan un humedal de importancia global -como es el caso de L’ Albufera de Valencia- y que han demostrado y avalado sus trabajos de conservación y restauración del espacio natural.
Valencia es la primera ciudades española que logra este distintivo, que reconoce los esfuerzos realizados por su Ajuntamiento y que, al tiempo, le exige que siga avanzando en su compromiso por la recuperación del humedal. El distintivo se ha entregado en la 14ª Conferencia de las Partes (COP) de Ramsar, que se celebra hasta el próximo 13 de noviembre de forma híbrida en las ciudades de Wuhan (China) y Ginebra (Suiza). SEO/BirdLife participa en las negociaciones y actúa como punto focal para España del Programa de Comunicación, Educación y Concienciación Pública (CeCOP) de la Convención. La capital de la Comunitat Valenciana es la 44ª ciudad en obtener el distintivo, y la novena que lo hace en la Unión Europea.
«Que Valencia sea una ciudad Ramsar supone un reconocimiento a los esfuerzos y el liderazgo del Ajuntament de València por recuperar el humedal y redobla el seguimiento que hace el Covenio Ramsar sobre el espacio. Es, sin duda, motivo de celebración pero esto no nos puede hacer olvidar que la laguna continua en un estado de conservación grave debido a que todavía entra demasiada agua sin depurar, fundamentalmente de origen urbano. A ello se añade la necesidad de garantizar el caudal suficiente, cuestión que se ve dificultada por el cambio global, entre otras cuestiones», apunta el delegado de SEO/BirdLife en la Comunitat Valenciana, Mario Giménez.
«La conservación de L’Albufera, como ocurre en el resto de los 75 humedales Ramsar de nuestro país, atañe a todos los niveles de la Administración, nacional, autonómico y municipal. El distintivo «Ciudad Ramsar» viene a reconocer y reforzar el papel de los ayuntamientos en la conservación de los espacios, que suele ser activo pero que también suele quedar en un segundo plano. Valencia ha sido la primera pero nuestro país tiene el potencial de acoger otras ciudades Ramsar. Animamos a los ayuntamientos comprometidos con la conservación de sus humedales de importancia internacional a activar su candidatura, por el bien el humedal y el bienestar de sus vecinos», apunta el responsable de Gobernanza de SEO/BirdLife, presente en la negociaciones en Ginebra.
L’Albufera, en peligro de desaparición
las lagunas costeras seas declaradas como primer hábitat en peligro de desaparición en España, una medida que facilitaría las acciones de conservación.
L’Albufera, junto a Doñana, Mar Menor y Delta de l’Ebre, representan en torno al 90% del conjunto de lagunas costeras que alberga España. Este hábitat es fundamental en la riqueza natural de España y decisivo en su estrategia para mitigar y adaptarse al cambio climático, y su realidad es preocupante: los cuatros espacios presentan un estado de conservación muy pobre, con situaciones de emergencia como las que se han vivido en Doñana o Mar Menor en los últimos años. Esta pésima situación ha motivado que SEO/BirdLife haya solicitado formalmente al Gobierno de España queLa situación de las lagunas costeras no es aislada. En términos generales, SEO/BirdLife cuenta con información completa de 61 de los 76 sitios Ramsar en España, en torno a un 80%. Y, de ellos, solo el 12% presenta un buen estado de conservación. Más de la mitad, el 54%, presenta un estado pobre o muy pobre (un 30%).
Todos los humedales estudiados están expuestos a presiones ‘altas’ o ‘muy altas’. Las principales son la contaminación del agua, ya sea difusa o puntual, que en conjunto afecta al 70% de los humedales analizados; la falta de agua ya sea por afección directa al régimen de caudales o por la sobreexplotación de los acuíferos, que ejerce una presión ‘alta’ o ‘muy alta’ sobre el 53% de los humedales estudiados; y la sedimentación y colmatación, que afecta a 29 de los sitos Ramsar analizados.
Si ampliamos el foco al conjunto de los humedales de España, y de acuerdo con los datos oficiales, la radiografía es similar: prácticamente la mitad (48,8%) de los humedales del inventario español de humedales -todavía incompleto, a la espera de las aportaciones de distintas regiones- están alterados o muy alterados, con un 0,8% de desaparecidos.
En ese porcentaje de humedales mal conservados se incluyen algunas de las joyas de la biodiversidad de España, y de las joyas de la Convención Ramsar, al menos, en Europa. Es el caso de Doñana, que acumula 32 años en el Registro Montreaux, el mecanismo de la Convención para llamar la atención sobre aquellos humedales Ramsar que hayan sufrido o puedan sufrir modificaciones en las condiciones ecológicas sin que se hayan puesto en marcha medidas eficaces para evitarlo o solucionarlo. Las Tablas de Daimiel también figura en este listado, por el mismo número de años.