Ganga ibérica
Pterocles alchata
Las gangas son aves propias de desiertos y estepas de África y Asia, que están representadas en la Península Ibérica, de modo marginal, por dos especies, las cuales aprovechan medios agrícolas de secano tradicionales. La profunda modificación del campo español es responsable del serio declive que padece la población de la ganga ibérica, hoy reducida a solo 7.500 individuos.
CAT / Ganga eurasiàtica
GAL / Cortizol ibérico
EUS / Ganga azpizuria
ENG / Pin-tailed Sandgrouse
La especie se está enfrentando a un riesgo alto de extinción en estado silvestre.
Escucha su canto:
Ganga ibérica
Pterocles alchata
Información
Pterocliformes
Pteroclidae
31-39 cm
55 cm
Identificación
La ganga ibérica es un ave de hábitos terrestres, compacta, corpulenta y de colores miméticos.
El macho exhibe una contrastada cabeza, con cara anaranjada, ojo oscuro rodeado de un anillo azul, y lista ocular y garganta negras (dibujo 1). Tiene el cuello y la nuca de color naranja verdoso, y el pecho rojo castaño, enmarcado por dos bandas negras, de las cuales la inferior delimita el vientre, llamativamente blanco. El dorso presenta ocelos dorados que se pierden en invierno, y en las alas plegadas aparecen espejuelos de color verde metálico y con ribetes oscuros. Posee cola muy apuntada, vermiculada por arriba, lo mismo que el obispillo, y blanca con banda subterminal negra por abajo. El pico y las patas, de dedos cortos, son grises, y la parte anterior del tarso está emplumada en blanco. Se diferencia de la ganga ortega por su menor tamaño, su vientre blanco y su cola con plumas centrales muy largas.
La hembra es muy parecida, pero menos vistosa. Sus partes inferiores resultan similares a las del macho, pero tiene la garganta blanca y tres bandas negras en el cuello y el pecho. Por su parte, las zonas superiores están más vermiculadas, y los ocelos del dorso muestran además áreas azules (dibujo 2).
Los jóvenes son una versión más pálida y menos contrastada de los adultos de cada sexo.
Esta ave exhibe un vuelo poderoso y rápido, que deja ver sus alas apuntadas, blancas y negras por abajo (dibujo 3). De hábitos gregarios, más marcados fuera de la época de cría, suele observarse en grupos, por lo general mayores que en la ganga ortega.
Canto
Su voz, muy distintiva, consiste en un áspero graznido (kataa…, kata… y gaaa…, gaaa…), que puede recordar al reclamo de la grajilla.
Dónde vive
En el mundo
La ganga ibérica se extiende por la franja árida que recorre la Península Ibérica, el sur de Francia, el Magreb, Oriente Próximo y Oriente Medio hasta Kazajistán.
Cuenta con dos subespecies reconocidas: una europea, presente en la Península Ibérica y Francia; y otra, de cola más larga, en el Magreb y Asia. Las poblaciones más orientales de esta última subespecie son migradoras.
En España
Cría en 23 provincias, agrupadas en 5 núcleos: la Meseta norte, el valle del Ebro, Extremadura, la Meseta sur y las marismas del Guadalquivir.
En la Península aparece la forma alchata, que es accidental en Canarias.
Para más información sobre su distribución territorial y otros datos de interés, consulta la ficha de la ganga ibérica en el III Atlas de las aves en época de reproducción en España.
Más información
Consulta el siguiente enlace para ampliar la información sobre esta especie.
Invernada fuerte
Invernada floja
Estival
Residente
Desplazamientos
Aunque en España suele incluirse entre las aves residentes, es probable que realice grandes movimientos dentro de la Península, por ahora poco o nada conocidos. Así, se han descrito aumentos de población en invierno en la Meseta sur y en Doñana, adonde acuden ejemplares de origen desconocido, pero quizás de zonas más norteñas.
La especie permanece en estas áreas invernales hasta mayo.
Población
La Lista Roja Europea de Aves (2021) estima una población europea de unos 16.000 individuos, con tendencia estable.
En España, en el año 2019, se estimó una población de unos 7.700 ejemplares durante el periodo reproductor, de los cuales más del 60 % se situarían en la meseta Sur.
Cómo vive
Hábitat
La ganga ibérica es una especie ligada durante todo el año a zonas semiáridas, estepas y cultivos extensivos de secano. Prefiere las llanuras con mosaicos de secano, barbechos, pastizales secos y eriales, y evita las siembras, los matorrales de cierta altura y la presencia de arbolado disperso.
Suele instalar el nido en zonas de pasto y barbecho, y en invierno puede mezclarse entre los bandos de sisones que ocupan siembras de leguminosas, sobre todo de alfalfa.
Cría desde el nivel del mar hasta los 1.000 metros de altitud que alcanza en la Meseta norte, y necesita que cerca de las zonas de reproducción haya bebederos accesibles y despejados.
Alimentación
Su dieta, casi exclusivamente granívora, está constituida sobre todo por pequeñas semillas de plantas herbáceas, preferentemente leguminosas, de las que a veces come sus hojas. En general es mayor el consumo de grano cultivado en verano y de semillas silvestres en invierno. Este tipo de alimentación exige la toma regular de agua, especialmente en épocas calurosas, cuando acude a los bebederos al menos dos veces diarias: dos o tres horas después del amanecer, y una o dos horas antes del ocaso.
Reproducción
El periodo de cría abarca de abril a agosto, pudiendo extenderse hasta octubre.
La especie realiza una puesta de tres huevos, con mayor frecuencia en junio, en una pequeña depresión del suelo, generalmente a resguardo de una mata o roca. Las altas tasas de predación (que afectan al 60% de los huevos) hacen que sean habituales las puestas de reposición, las cuales pueden prolongarse hasta agosto.
Los huevos resultan muy crípticos, con el fondo de color ocre verdoso y numerosas motas oscuras. La incubación, que dura unos 20 días, corre a cargo de ambos sexos: el macho incuba de noche y por la mañana; la hembra, el resto del día.
Los pollos son miméticos, y al poco de nacer abandonan el nido para seguir a los padres y alimentarse por sí solos. Con tres o cuatro semanas de vida efectúan cortos vuelos, pero hasta que cumplen dos meses y alcanzan el tamaño de adulto no vuelan adecuadamente. Hasta esa edad, los progenitores deben proporcionarles agua, tarea que realizan gracias a que las plumas de su pecho pueden absorber el líquido.
La ganga ibérica es un ave longeva, con al menos 10 años de vida, y con tasas reproductivas bajas.
Meses en los que se puede ver la especie en España
Amenazas y conservación
La especie se está enfrentando a un riesgo alto de extinción en estado silvestre.
La ganga ibérica aparece en el Libro Rojo de las aves de España (2021) en la categoría de VU – Vulnerable”. El Catálogo Nacional de Especies Amenazadas también la incluye en esta categoría.
Esta especie presenta un estado de conservación desfavorable en España. La principal amenaza, con diferencia, procede de la pérdida de hábitat ocasionada por los profundos cambios que ha sufrido en las últimas décadas el medio rural y agrario, como consecuencia de la intensificación agrícola, la reducción de linderos y barbechos, la reforestación de tierras agrarias y el aumento de olivares y regadíos. Asimismo, se sigue perdiendo hábitat favorable para la ganga por culpa del avance de la urbanización y la expansión de las infraestructuras como pueden ser las vías de circulación, los tendidos eléctricos, las placas fotovoltaicas y los parques eólicos. A estos factores hay que sumar el uso excesivo de plaguicidas, la caza ilegal y una elevada carga ganadera. Todo ello ha producido un fuerte declive en la población y en su área de distribución en todos los núcleos españoles. Se estima que la población española ha disminuido un 19 % entre 2005 y 2019. Las medidas de conservación que se deben aplicar pasan por reorientar las políticas agrícolas actuales hacia programas agroambientales que primen la reducción del uso de plaguicidas y de la carga ganadera, la diversificación del paisaje y la limitación del regadío. También hay que preocuparse por los planes de desarrollo de infraestructuras en las zonas más sensibles para la especie y de elaborar planes de recuperación o conservación pertinentes que permitan, entre otras cosas, apoyar estudios de seguimiento de la población y su dinámica.