La esperada nueva Lista de las Aves de España, ya está aquí. Por Florentino de Lope

Estamos de enhorabuena, no solo en SEO/BirdLife, sino todos los ornitólogos, conservacionistas, científicos y gestores ambientales ligados a las aves. Acabamos de publicar la nueva Lista de las Aves de España, siete años después de la última versión. Aparecen 53 especies más: hemos pasado de 569 a 622, aunque no quiere decir que haya aumentado tanto la presencia de nuevas especies. Sí que es cierto que asoman 22 que se han registrado por primera vez desde la última actualización. Y otras cinco exóticas que están a punto de establecerse en el país. Hay algunas , por ejemplo la pardela cenicienta, que ya no está considerada como una especie sino como dos: la pardela cenicienta mediterránea y la canaria (población atlántica). O el pito real, al que a partir de ahora llamaremos pito real ibérico, que ha subido de escalón taxonómico dejando de ser subespecie.

Conocer con rigor todas las especies de un país tiene una importancia enorme, no solo por lo que implica ensaber científico propiamente dicho, sino por las consecuencias que acarrea de cara a la gestión conservacionista, sobre todo en un momento en el que el cambio climático y la modificación de los hábitats suponen alteraciones importantes en los territorios y en las aves asociadas.

Dar fe de estas presencias no es tarea fácil ni para los mayores expertos. Por eso en SEO/BirdLife hemos estrenado un nuevo grupo de trabajo que da consistencia y presencia a esta labor. Se trata del Grupo de Trabajo de Taxonomía, que hereda el trabajo y avances de tiempos anteriores, además de algunos de los prestigiosos ornitólogos ya dedicados desde siempre a esta labor, pero que de nuevo inician esta etapa con gran dedicación e implicación. La Lista de las Aves de España 2019 ya se ha presentado en Madrid y Barcelona, con una acogida calurosa, y próximamente lo hará en el País Vasco y otros lugares.

Miguel Rouco (coordinador), José Luis Copete, Eduardo de Juana, Marcel Gil-Velasco, Juan Antonio Lorenzo, Marce Martín, Borja Milá, Blas Molina y David M. Santos son los componentes de este gran equipo, algunos de los cuales sirven además de conexión entre este grupo y otros de nuestra organización, como el de Exóticas, el de Rarezas o el Noticiario. Son expertos del Museo Nacional de Ciencias Naturales, del Hanbook of theBirds of theWorld, del área de Ciencia Ciudadana de SEO/BirdLife o de la Universidad, entre otros ámbitos.

«No deja de ser una satisfacción ver que nuestra ciencia está viva, muy viva,

y que sigue habiendo estudiosos dispuestos a “desplumarse” el cerebro para

actualizar el conocimiento»

Establecer un criterio uniforme teniendo en cuenta las distintas escuelas taxonómicas mundiales, que no siempre están de acuerdo, ha sido una de las principales dificultades que han tenido que afrontar. Hasta que estas lleguen a un consenso global, el grupo ha decidido basarse en la WorldBirdList de IOC -de uso más extendido entre las sociedades científicas- y en la Checklist de HBW/BirdLife, utilizada por organismos vinculados a la conservación de las aves.

Su ingente dedicación puede verse en otras muchas modificaciones respecto a la lista anterior. Se han reordenado sustancialmente los taxones y 23 familias han sufrido modificaciones. Por ejemplo, la del urogallo (Tetraonidae) ha pasado a ser Phasianidae, y las currucas, zarceros o carriceros, que antes compartían familia –(Sylviidae)– se han hecho independientes. Algo similar le ocurre a los zorzales, collalbas y tarabillas, que también abandonan la familia común Turdidae. Además, seis especies que antes estaban contempladas ya no aparecen al haberse reconsiderado su estatus, entre ellas, dos consideradas extintas y que en realidad nunca estuvieron en España: la perdiz griega y el gallo lira.

Cada vez que tienen lugar estas actualizaciones, los ornitólogos y aficionados a las aves hemos de hincar los codos de nuevo para reaprender nuevas denominaciones y jerarquías, pero no deja de ser una satisfacción ver que nuestra ciencia, la de los pájaros, está viva, muy viva, y que hay estudiosos en el campo y en los despachos dispuestos a “desplumarse” el cerebro para tenernos muy al día de lo que sucede en el medio natural y en las poblaciones aladas. Gracias a todos por su esfuerzo y desinteresada dedicación.

 

 

 

 

 

 

Tribuna publicada en el último número de Aves y naturaleza