La 12ª Conferencia de las Partes de la Convención sobre Conservación de las Especies Migratorias de Animales Silvestres (CMS), que concluye hoy en Manila (Filipinas), será la conferencia de los buitres. Los 126 países que forman parte de este organismo, coordinado por Naciones Unidas, han pactado la inclusión de diez especies en el apéndice I de la convención, lo cual eleva la alarma ante el riesgo de extinción y conmina a los países firmantes –entre ellos, España– a prohibir su captura, conservar sus hábitats y eliminar obstáculos para sus movimientos migratorios.
Asimismo, los Estados miembro de la convención han dado luz verde a un plan con más de 100 acciones para hacer frente a las principales amenazas que sufren las poblaciones de buitre del Viejo Mundo, aquellos que habitan en Eurasia y África.
De las 23 especies de buitre que existen, 16 se encuentran amenazadas. La situación de ocho de ellas es crítica. La puesta en marcha de esta estrategia supondrá un importante respaldo para la conservación de estas aves necrófagas también en España, donde reside la población de buitres más importante de Europa y una de las mejor conservadas del planeta.
“Sin duda, esta conferencia ha supuesto un gran avance para garantizar la supervivencia de los buitres, unas aves fundamentales en los ecosistemas naturales. Baste un ejemplo: su dieta necrófaga previene la extensión de enfermedades en la naturaleza derivadas de la putrefacción de cadáveres de animales silvestres”, explica el responsable de Gobernanza Ambiental de SEO/BirdLife, Juan Carlos Atienza.
Y añade: “Es una noticia especialmente feliz para todos los que componemos BirdLife. Nuestra federación solicitó este plan y ha trabajado activamente en su diseño. De hecho, la redacción final se gestó en Toledo hace unos meses, en una reunión de 200 expertos auspiciada por SEO/BirdLife con el apoyo de la Junta de Castilla-La Mancha”.
Entre otras medidas, el plan de acción buscará la prohibición del uso de productos tóxicos que afectan a los buitres -incluyendo cebos envenenados-, y la sustitución de la nociva munición de plomo. De igual modo, se trabajará para acabar con el comercio de partes de buitres utilizados en hechicería, especialmente en África y Asia; minimizar la mortalidad por electrocución y colisión en tendidos y aerogeneradores; y garantizar que las aves dispongan de suficiente alimento libre de sustancias tóxicas.
Para SEO/BirdLife, la protección sin fisuras que ha aprobado la CMS lanza un claro mensaje a España, Portugal e Italia, los tres países de la Unión Europea con poblaciones de buitre para que prohíban el uso de diclofenaco veterinario. Este fármaco antiinflamatorio, inocuo para el ser humano, es letal para los buitres, que lo ingieren a través de los cadáveres de ganado. Existen alternativas seguras para los buitres y de coste similar.
Protección para 35 especies
En total, la 12ª conferencia de la CMS ha acordado elevar la protección de 35 especies, que se incorporan a sus apéndices I ó II. La inclusión en el II urge a los países firmantes a colaborar internacionalmente para asegurar su conservación. Entre los animales migratorios protegidos destacan el chimpancé, con un declive poblacional del 50% en las últimas tres generaciones; el león africano, que sufre una reducción del 43% comparado con los datos de 1993; o el oso del Gobi, una subespecie del oso pardo que apenas cuenta con 45 ejemplares en estado salvaje.
La jirafa, el chita o el tiburón ballena también han visto elevado su grado de protección al ser incluidos en los apéndices de la CMS. En el caso de la jirafa, la CMS es el primer convenio que las protege.
Especies de buitre incluidas para el apéndice I de la CMS
Buitres africanos
Buitre de El Cabo, alimoche sombrío o buitre encapuchado, buitre moteado, buitre dorsiblanco africano y buitre cabeciblanco.
Buitres asiáticos
Buitre indio, buitre picofino, buitre dorsiblanco bengalí y buitre cabecirrojo.
Los buitres africanos se encuentran amenazados por el extendido uso de veneno en el continente, la captura y comercio de ejemplares para usos tradicionales, la falta de alimento y la pérdida de sus hábitats. En el caso de Asia, estas rapaces sufrieron en la década de los 90 los efectos del diclofenaco, que llevó al colapso a varias especies.
Además, a propuesta de Israel, se aprueba la inclusión en el apéndice I del buitre tordo u orejudo.
España cuenta con la que es, probablemente, la mayor y mejor conservada colonia de aves necrófagas de Europa, con colonias de buitre negro, buitre leonado, alimoche o quebrantahuesos. A pesar de la responsabilidad internacional que supone ser hogar de especies protegidas y amenazadas en otros puntos del planeta, el Gobierno español autoriza la administración de diclofenaco veterinario a ganado. Este fármaco, inocuo para el ser humano, puede ser letal para los buitres. SEO/BirdLife y WWF España se han unido a la campaña internacional Ban Vet Diclofenac para impedir que se siga administrando esta droga veterinario en los tres países de la UE con presencia de buitres: España, Portugal e Italia. Existen alternativas seguras para los buitres y que no suponen un mayor coste para los ganaderos.
La campaña recaba el apoyo ciudadano para prohibir el diclofenaco a través de la página web banvetdiclofenac.org