Lanzamos la campaña `La acción más rentable´ con el fin de mostrar los importantes beneficios para la economía, la salud y el empleo que supondría una inversión adecuada en políticas que combaten el cambio climático. Europa y España obtendrían beneficios económicos de un billón y 94.000 millones de euros, respectivamente, a 2030.
“¿Crees que invertir para reducir el cambio climático es caro? No hacerlo cuesta mucho más. Invertir en energías renovables, transporte limpio o agricultura sostenible es rentable para todos”. Así comienza el vídeo de la campaña La acción más rentable, que acabamos de lanzar para convencer de que “reducir las emisiones de gases y sus efectos ̶ aumento de la temperatura, sequías o inundaciones ̶ es mucho más barato que las costosas consecuencias del cambio climático”. Pero el argumento económico sigue usándose en numerosos ámbitos para retrasar la acción climática, a pesar de los dramáticos costes del calentamiento global.
Para echar por tierra esta percepción errónea, hemos realizado, junto a trece ONG europeas, el informe Beneficios del Acuerdo de París, dentro del proyecto Life Clima 1.5. El estudio muestra que los rendimientos adicionales de llevar a cabo una acción climática decidida para frenar el aumento de la temperatura a un grado y medio (tal y como contempla el Acuerdo de París) superarían con creces sus costes y evitarían múltiples pérdidas.
Este informe y campaña surgen en plena recta final del proceso de actualización de los planes nacionales de energía y clima (PNIEC). La peligrosa brecha entre las políticas actuales y la urgente necesidad de abordar la inminente crisis climática estará en el centro del debate político en este año electoral, y nuevos hallazgos afirman que la acción climática no solo es necesaria, sino económicamente ventajosa.
Beneficios que eclipsan los costes
El presente informe cuantifica los beneficios en salud, empleo, coste de vida, pérdidas de bienestar evitadas, seguridad energética y extracción de recursos restada para una acción climática alineada con lo que marca el Acuerdo de París. Esto se traduce en recortes brutos de emisiones de al menos un 65% para 2030 en Europa, en comparación con el objetivo actualmente previsto del 55-57%, y en conseguir la neutralidad climática para 2040. La conclusión inequívoca es que estos beneficios superan significativamente los costes (por un factor de 2,4 en el caso de España), lo que constituye un argumento económico rotundo para una transición integral que convencerá incluso a los más escépticos.
Entre los beneficios económicos reflejados en el informe destaca el ahorro para 2030 de un billón de euros en Europa, cifra que en el caso de España se acercaría a los 94.000 millones, lo que equivale a un 7,2% del PIB de 2022 de nuestro país. Para llegar a esta cifra se ha tenido en cuenta un crecimiento del PIB de 45.500 millones de euros, un ahorro de recursos de 18.400 millones de euros, una mejora de la salud cifrada en 9.000 millones de euros y un ahorro energético de 21.600 millones de euros, que se sumarían a los 90.700 millones previstos en el PNIEC al reducir la importación de combustibles fósiles.
A los beneficios económicos, se suman los de salud, con 3.027 muertes prematuras al año evitadas, y los de empleo: 185.648 empleos directos adicionales (personas/año).
Aunque se estima que alcanzar los objetivos a 2030 actualmente fijados para España requerirá una inversión total acumulada de 294 mil millones de euros hasta 2030, según datos del borrador del PNIEC 2023-2030 de España, las pérdidas por el cambio climático evitadas son significativamente superiores, llegando a un ahorro de 402.000 millones de euros a 2100 frente a un escenario de políticas actuales, y hasta 2,2 billones de euros frente a un escenario de inacción.
Respecto a la Unión Europea, podrían evitarse pérdidas acumuladas desde ahora hasta 2100 cifradas en 22,2 billones de euros frente a la inacción, o incluso en cuatro billones de euros, respecto a los compromisos políticos actuales.
Para SEO/BirdLife, es fundamental que la UE y sus Estados miembros tomen medidas climáticas decisivas y audaces ahora. En primer lugar, por una cuestión de responsabilidad política y de justicia social. Tanto la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) como el Acuerdo de París enfatizan la necesidad de que los países actúen más rápido, con base a su responsabilidad histórica y sus respectivas capacidades económicas. Este informe aporta argumentos convincentes de que la acción climática no sólo es necesaria, sino beneficiosa. Proteger a las personas y al planeta de los efectos devastadores del cambio climático es un deber moral, así como una decisión acertada.
`No te dejes engañar´
“La acción climática solo trae cosas buenas y es el único camino posible; no te dejes engañar”. Así de claro es el mensaje que aparece en el vídeo de la campaña de difusión del informe internacional. De esta forma se quiere llegar a todos los sectores de la sociedad española, incidiendo en que “no actuar conllevaría una superinversión muchísimo más costosa para hacer frente a los daños producidos por el cambio climático”.
Finalmente, anima a actuar y a trabajar “Juntos por un futuro sostenible, resiliente, justo y socialmente beneficioso”.
SEO/BirdLife participa en el proyecto Life Clima 1,5 que une a 13 organizaciones de la sociedad civil, para poner la lupa sobre las políticas climáticas de 13 países de la Unión Europea, con el fin de conocer sus propuestas y valorar si están en línea con lo que demanda la crisis ecológica actual.
Los países implicados en el proyecto -denominado en su dimensión internacional como Together for 1.5- cada uno representado por una ONG medioambiental, son Alemania (Germanwatch), Bélgica (Bond Beter Leefmilieu Vlaanderen – BBL), Bulgaria (Environmental Association “Za Zemiata” – ZZ), Croacia (Society for sustainable development design – DOOR), República Checa (Centre for Transport and Energy – CDE), Dinamarca (Gruppen 92), Estonia (Estonian Fund for Nature – ELF), Francia (Réseau Action Climat), Hungría (National Society of Conservationists – NSC – FoE HU), Polonia (Institute for Sustainable Development – ISD), Portugal (ZERO), Eslovenia (FOCUS) y España (SEO/BirdLife), bajo el paraguas de la organización Climate Change Network (CAN) Europe.