El Ministerio de Agricultura ha iniciado las obras de la tubería de Valdurrios, en Los Monegros, para poner en marcha miles de hectáreas de regadío, sin disponer de dotación de agua, con un gasto previsto que se eleva a 50 millones de euros. Desde SEO/BirdLife recordamos los compromisos ambientales con la Unión Europea para declarar un espacio natural protegido, aprobar los planes de conservación de especies esteparias amenazadas o medidas agroambientales específicas para los agricultores y ganaderos de secano en Monegros.
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y el Gobierno de Aragón gastarán 52 millones de euros en una tubería (denominada Valdurrios) con el objetivo de poner en marcha miles de nuevas hectáreas de regadío en Los Monegros. Sin embargo, no existe disponibilidad de agua para esta demanda, y ni tan siquiera los regadíos actuales tienen suficiente dotación. Es más, se calcula que en Riegos del Alto Aragón deberían dejar de regarse unas 40.000 ha para poder salvar al resto de regadíos consolidados. Además, ambas Administraciones, estatal y autonómica, comprometen una vez más las expectativas de los regantes desarrollando unas inversiones que jamás llegarán a utilizarse. Esta infraestructura, además, obliga a adelantar el dinero a cada particular que quiera aprovecharse de las concesiones de riego de esta obra hidráulica, lo cual pone en riesgo a cientos de familias, algo que ya pasó hace 20 años y todavía están pagando.
Por ello, en SEO/BirdLife, consideramos contraproducente que el MAPA y el Gobierno de Aragón gasten el dinero de todos los contribuyentes en grandes infraestructuras hidráulicas o en nuevos regadíos para los cuales no hay disponibilidad real de agua, cuando, además, los expertos en desarrollo rural y gran parte de los agricultores entienden que hay que reducir la superficie neta de regadío, y bajo ningún concepto aumentarla.
La biodiversidad peligra en Monegros
Por otro lado, los datos de indicadores de biodiversidad agrícola y esteparia en Los Monegros muestran tendencias negativas. Todas las especies de aves amenazadas han descendido sus poblaciones y es inviable ambientalmente considerar nuevos impactos ambientales como los que causan los regadíos. Y es que cuando un terreno se convierte de secano a regadío, va normalmente aparejado a un cambio de cultivo, y la modificación del hábitat afecta a la composición de la biodiversidad, y especialmente a las especies protegidas que suelen desaparecer del agrosistema transformado.
Por ello, solicitamos que no se lleve a cabo la tubería de Valdurrios, y propone, una vez más, que se cumplan los compromisos ambientales que el Gobierno de Aragón y el Reino de España adquirieron con la Unión Europea en Los Monegros, que incluyen la declaración de un parque natural y la aprobación de los planes de conservación de las especies esteparias. También es necesario que se apruebe una medida agroambiental específica para Los Monegros que favorezca a los agricultores de secano y a los ganaderos extensivos, lo que, tal como indican los estudios económicos, repercutiría positivamente en el territorio. Pero incluso más allá, para SEO/BirdLife, la zona merece su declaración como Parque Nacional de las Estepas de Los Monegros, contribuyendo así a completar la red de parques nacionales de España y reconocer unos valores naturales excepcionales que pueden ayudar también a la necesaria diversificación y creación de empleo.
“Precisamente, este modelo tradicional agropecuario es el pilar que mantiene la biodiversidad de Los Monegros, que conserva ecosistemas agroesteparios y especies de gran interés a escala europea, algunas tan amenazadas como la alondra ricotí (rocín), el sisón común, la avutarda común, las gangas común y ortega, las terreras común y marismeña, y cernícalo primilla, entre otras especies”, ha subrayado Luis Tirado, delegado de SEO/BirdLife en Aragón.
Un modelo que pretende impulsar el proyecto Secanos Vivos, coordinado por SEO/BirdLife, con la colaboración de la Fundación Biodiversidad con fondos Next Generation, y que tiene por objeto transformar el actual modelo de producción agraria de secano de cereal y vid, en riesgo de desaparición por su escasa rentabilidad, en un modelo que aporte un valor añadido a estos productos a través del aumento de la biodiversidad y resiliencia climática.
Precisamente, una de las fincas piloto del proyecto se encuentra en Los Monegros, La Bodega Vino del Desierto, donde se que cultivan pequeñas parcelas de viñedo de secano en poco más de seis hectáreas de variedades tradicionales, como la Garnacha, Mazuela, Macabeo o Alcañón. Esta bodega familiar se ha unido al proyecto Secanos Vivos bajo la convicción de que la conservación de la biodiversidad asociada a los cultivos extensivos de secano y la rentabilidad pueden ir de la mano en esta zona semiárida de Aragón.
“Tratar de promover nuevos regadíos en estas tierras de secano es seguir alimentando una política obsoleta para la cual no hay recursos suficientes y que genera falsas expectativas de disponibilidad infinita de agua entre los agricultores. La apuesta de futuro es adaptarse al cambio climático reduciendo regadíos y aprovechar el valor natural de las estepas y su rica y singular biodiversidad para poner en valor los cultivos de secano. Por su exclusividad en Europa, Monegros está a la altura de otras zonas semidesérticas famosas en el mundo, pero en Aragón nos cuesta verlo, y no debemos permitirnos perder para siempre un espacio tan valioso y singular por el cual deberíamos sentirnos orgullosos”, ha declarado Tirado.