El estudio evaluará los efectos de la afluencia de público en el Parc Natural dels Ports, el Parc Natural del Montseny, el Espai Natural Protegit de l’Alta Garrotxa y la Reserva Nacional de Caça de Boumort . Se utilizarán cámaras de fototrampeo y grabadoras de sonido para analizar el impacto sobre mamíferos y aves con el objetivo de impulsar un turismo forestal compatible con la biodiversidad
Un nuevo estudio coordinado por el Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña (CTFC), en colaboración con la Fundació Emys, Fundació Trenca y SEO/BirdLife, está evaluando los efectos de afluencia de público en cuatro espacios naturales protegidos de Cataluña. A través de cámaras de fototrampeo y grabadoras de sonido, los investigadores pretenden determinar el impacto de la presencia humana sobre diversas especies de fauna, como mamíferos y aves, en hábitats forestales. El estudio, que se inició el pasado mes de abril y se alargará durante dos años, se encuentra ahora en el momento clave de coincidencia entre el pico de visitantes y la época de cría de muchas especies.
Los espacios naturales seleccionados para este estudio son el Parc Natural dels Ports (Tarragona), el Parc Natural del Montseny (Barcelona y Girona), el Espai Natural Protegit de l’Alta Garrotxa (Girona) y la Reserva Nacional de Caça de Boumort (Lleida). Estos lugares han experimentado durante las últimas décadas un aumento significativo de visitantes que acuden a los espacios naturales con la intención de disfrutar del entorno y realizar actividades recreativas al aire libre. Sin embargo, diversos estudios realizados en espacios naturales protegidos sugieren que la compatibilización del uso público y la conservación de los valores naturales requiere de una gestión específica.
La presencia humana constante e intensa en los espacios naturales puede interferir en el comportamiento de algunas especies, limitando su espacio vital disponible y alterando su reproducción. Este impacto se da especialmente en primavera y verano, momento en que coinciden la época de cría y el pico de visitantes en la mayoría de los espacios. Además, el paso constante de personas en estos espacios tiene otros efectos como la erosión del suelo y daños en la vegetación.
Entre las causas que se atribuyen a este aumento de afluencia se incluyen el incremento de población, la creciente demanda de contacto con la naturaleza, la popularización del coche privado como medio de transporte o la democratización de la información, que permite a un gran número de usuarios conocer espacios naturales a través de Internet y redes sociales.
Compatibilizar beneficios de la naturaleza y conservación de espacios
El contacto con la naturaleza y las actividades al aire libre son esenciales para una buena salud física y mental. Por este motivo, el estudio busca compatibilizar las actividades recreativas al aire libre con la conservación de los valores ecológicos de estos espacios. De esta manera se propondrán medidas para recuperar y mejorar los ecosistemas forestales, protegiendo zonas especialmente sensibles para la fauna y la flora, informando a los usuarios sobre prácticas respetuosas y construyendo espacios más resilientes frente al cambio climático y los incendios forestales.
Esta actuación se enmarca en el proyecto Flow4Bio, Bosques Fluidos para la Biodiversidad y las Personas, que promueve el turismo forestal sostenible en zonas rurales, combinando desarrollo económico con conservación de la biodiversidad. Sus objetivos incluyen mejorar y unificar la gestión de bosques con mucha frecuentación humana y transferir conocimientos entre provincias y comunidades autónomas para fomentar destinos turísticos de calidad y resilientes al cambio climático.
El proyecto cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU.