Críalo europeo
Clamator glandarius
El aspecto más llamativo de la biología del críalo es su estrategia reproductora, basada en la parasitación de nidos de córvidos, sobre todo urracas. Ave de aspecto característico, gárrulo canto y hábitos migradores, este cucúlido es capaz de alimentarse casi en exclusiva de orugas de todo tipo, incluso las que están protegidas por sustancias tóxicas o pelos urticantes. España cuenta con la mayor población europea de la especie que, por el momento, no parece presentar graves problemas de conservación.
CAT / Cucut reial
GAL / Cuco grallo
EUS / Kuku mottoduna
ENG / Great Spotted Cuckoo
Especie abundante y de amplia distribución territorial que, una vez evaluada, se considera fuera de las categorías con mayor grado de amenaza.
Escucha su canto:
Críalo europeo
Clamator glandarius
Información
Cuculiformes
Cuculidae
35-39 cm
54-60 cm
Identificación
El críalo europeo es un ave de tamaño medio, morfológicamente muy semejante al cuco, del que se diferencia por su aspecto más esbelto, por tener una cola más larga y por el colorido del plumaje. Este es de tono marrón grisáceo en las regiones dorsales, que aparecen salpicadas de motas blancas, al igual que ocurre con las plumas del ala. La zona ventral es de color blanquecino, con la garganta teñida de ocre-amarillento. En la cabeza luce un capirote de color gris plateado que remata en una pequeña cresta ligeramente eréctil y un anillo ocular rojo (dibujo 1).
El joven presenta una coloración incluso más vistosa que los adultos, pues exhibe un intenso color achocolatado con abundantes motas blancas en el dorso y unas regiones ventrales blancas, que se tornan amarillo-ocráceas en pecho y cuello. Las plumas de vuelo poseen un vistoso color rojizo, en tanto que el capirote es negro y el anillo ocular más conspicuo que el de los adultos (dibujo 2).
Canto
Especie bullanguera y gárrula, el críalo emite diversos sonidos para comunicarse, como un graznido repetitivo similar al de los córvidos, arr, arr, arr; un sonoro ki-ki-kri-krie-krie, cuyo ritmo se decelera hacia el final de la estrofa, y un chirriante cherr-cherr, chi-chi, cherrrr.
Dónde vive
En el mundo
La especie se distribuye por diferentes regiones del centro y sur de África, con algunas poblaciones aisladas en el norte del continente, así como en Oriente Medio. En Europa es un ave estival que aparece en diferentes regiones de la cuenca mediterránea, como la Península Ibérica, Turquía, el sur de Francia, Italia y Chipre.
Se reconocen varias subespecies, de entre las cuales, la presente en Europa y la mitad septentrional de África es glandarius.
En España
Se distribuye por gran parte del territorio peninsular, si bien resulta muy escaso en toda la franja norte y Galicia. Asimismo, evita las áreas montañosas de gran altitud. En la mitad sur presenta una distribución bastante fragmentaria, aunque puede ser abundante en algunos puntos. No aparece como reproductor en Canarias, Ceuta y Melilla. En Baleares se encuentra ocasionalmente, pero no cría.
La distribución del críalo europeo se superpone en gran medida con la de las especies a las que parasita para criar, la urraca común (Pica pica) y la corneja negra (Corvus corone). Esto explicaría la expansión de la especie hacia zonas costeras de las provincias de Cádiz y de Málaga, algo que parece suceder en paralelo a la expansión de su principal hospedador, la urraca.
Para más información sobre su distribución territorial y otros datos de interés, consulta la ficha del críalo europeo en el III Atlas de las aves en época de reproducción en España.
Más información
Consulta el siguiente enlace para ampliar la información sobre esta especie.
Invernada fuerte
Invernada floja
Estival
Residente
Desplazamientos
Las poblaciones asentadas en las áreas más distantes de distribución de la especie (esto es, las mediterráneas y las surafricanas) se comportan como migradoras e invernan en las regiones tropicales de África, donde coinciden con la población residente local. Es posible que un pequeño número de individuos pueda pasar todo el invierno en el sur de la península.
La migración posnupcial es bastante temprana en el caso de las poblaciones reproductoras del hemisferio norte, ya que puede iniciarse en el mes de julio, aunque se prolonga hasta septiembre. El retorno a las áreas de cría se verifica ya a lo largo de febrero.
Población
En la Lista Roja Europea de Aves 2021 la población reproductora europea se estima entre 293.000 y 316.000 ejemplares maduros, con tendencia decreciente.
La mayor parte de los ejemplares europeos se localiza en nuestro territorio, unos 120.000 individuos. Aunque se considera que la tendencia poblacional en la Península es estable, desde 2008 se viene registrando un declive en el número de ejemplares. Descartando que el motivo de ese descenso resida en un menor número de potenciales hospedadores (el número de urracas ha decrecido muy moderadamente en la última década), las razones de este suceso podrían encontrarse en el descenso en la población de insectos en los últimos años debido al cambio climático y al abuso de insecticidas y pesticidas. Otra teoría igualmente plausible apunta a una posible desincronización, causada por el cambio climático, entre su reproducción y la de sus hospedadores.
Cómo vive
Hábitat
El críalo se instala en lugares donde abunden las especies a las que parasita, en particular, la urraca. Por tal motivo, es más frecuente en áreas abiertas o semiarboladas, con campos de cultivo, bosquetes de diferentes especies (preferentemente pinares), dehesas, vegas y paisajes agrarios en mosaico, desde el nivel del mar hasta los 1.300 metros de altitud.
Alimentación
Se alimenta, básicamente, de orugas de mariposas y polillas, incluidas las especies dotadas de defensas urticantes o tóxicas a las que no acceden otras aves, gracias a lo cual evita la competencia por los recursos alimenticios. Es habitual que frote contra el suelo o la corteza de los árboles a ciertas orugas (como la procesionaria del pino, una de sus presas habituales) para despojarlas de los pelos urticantes y minimizar así sus desagradables efectos. El espectro alimentario de este cucúlido se completa con hormigas, saltamontes, moluscos y algún pequeño vertebrado.
Reproducción
La especie practica lo que se denomina nidoparasitismo, es decir, deposita sus huevos en el nido de otra ave (normalmente, una urraca), que hará las veces de hospedadora, incubando y posteriormente alimentando a los descendientes del críalo, que evitará de este modo la costosa inversión energética que supone sacar adelante una nidada.
La biología reproductora del críalo está estrechamente ligada al ciclo vital de la urraca, de manera que cuando estas comienzan a realizar sus puestas, se desencadena en la hembra del parásito un mecanismo fisiológico que la lleva a producir un elevado número de huevos, gracias a lo cual una sola pareja de estos cucúlidos puede parasitar en una temporada hasta 25 nidos de urraca.
Los huevos imitan a la perfección a los de la especie parasitada. Han de colocarse en el nido seleccionado durante la ausencia de sus propietarios. Para lograrlo, es frecuente que el macho de críalo atraiga la atención de la pareja de urracas, momento que aprovecha la hembra para depositar de uno a tres huevos en el nido de los córvidos, no sin antes dañar o tirar una parte de la puesta legítima, preparando de este modo el camino a sus descendientes.
Tras un periodo de 11-15 días de incubación por parte del huésped, eclosionan los huevos parásitos con un adelanto de cinco o seis días frente a los de urraca. Los pollos de críalo suelen acabar pronto con las crías de urraca que han llegado a eclosionar, aunque no empujándolas fuera del nido como hace el cuco, sino mediante competencia por el alimento o por asfixia y aplastamiento gracias a su mayor grado de desarrollo y corpulencia.
Los jóvenes intrusos exigirán incesante y vehementemente los cuidados de la pareja parasitada durante algo menos de tres semanas y se unirán, unos pocos días después de abandonar el nido, a sus padres biológicos, junto a los que emprenderán la migración hacia África.
Además de la urraca (especie seleccionada con más frecuencia), el críalo también puede parasitar a otros córvidos, como cornejas, arrendajos o rabilargos.
Meses en los que se puede ver la especie en España
Amenazas y conservación
Especie abundante y de amplia distribución territorial que, una vez evaluada, se considera fuera de las categorías con mayor grado de amenaza.
El críalo europeo está incluido como especie Reproductora en la Lista Roja de las Aves de España, con la categoría de LC – Preocupación Menor.
También figura en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. Sin embargo, no está incluido en el Catálogo Español de Especies Amenazadas.
Se considera una especie amenazada en su conjunto, que ya ha desaparecido de algunas de sus áreas de reproducción como el norte de África. En nuestro territorio, el descenso en la población de insectos en los últimos años debido al cambio climático y al abuso de insecticidas y pesticidas, así como la desincronización en la reproducción con la de la urraca como consecuencia del cambio climático, se presentan como algunas de las principales amenazas.