Cría en zonas subárticas y ártico-montanas, en Europa generalmente a más de 200 metros de altitud, y ocupa turberas húmedas. En paso e invernada frecuenta un variado espectro de humedales, interiores o costeros, desde orillas de lagos hasta arrozales y salinas.

Come sobre todo gusanos poliquetos, pero también moluscos, insectos y semillas de plantas acuáticas.

Instala sus nidos en el suelo, a menudo sobre un montículo dentro de una turbera. La puesta consta de cuatro huevos.

La subespecie falcinellus anida en el norte de Europa, repartida entre el norte de Finlandia, las montañas de Escandinavia y un área relativamente pequeña de Rusia, y una segunda raza, sibirica, lo hace en el norte de Siberia, entre los ríos Lena y Kolima. La población de la primera, en disminución, se estima en unas 10.000-20.000 parejas reproductoras. Los cuarteles de invierno se extienden por zonas litorales del sur y este de África, el sur de Asia, Indonesia y Australia.

Las principales vías migratorias de los ejemplares europeos pasan por el este del continente, aunque hay una pequeña minoría de aves que parecen moverse a lo largo del litoral atlántico.

Para nuestro país se conocen 48 registros homologados entre 1996 y 2018, según datos del III Atlas de las aves en época de reproducción en España: 23 primaverales, 23 otoñales y dos invernales. De entre las áreas geográficas en las que se produjeron dichos avistamientos destaca a costa levantina y particularmente el delta del Ebro, repartiéndose la mayor parte de las fechas entre la primavera (abril y mayo) y el verano-otoño (con un pico en agosto), coincidiendo con los pasos migratorios.