La collalba del Atlas habita en montañas y mesetas pedregosas con escasa vegetación, habitualmente por encima de los 1.500 metros de altitud.

Se alimenta principalmente de insectos y otros invertebrados que localiza en el suelo o entre las rocas.

Anida en el suelo, en una cavidad entre las rocas. A veces en agujeros de cortados y terraplenes a poca altura de la base. La puesta más habitual es de 5 a 6 huevos, incubados solo por la hembra durante 14-16 días. Los pollos abandonan el nido a los 15 días.

Especie norteafricana, como su nombre indica, la collalba del Atlas se reproduce en la Cordillera del Atlas, en Marruecos y en menor medida en Argelia.
Para invernar se desplaza a la cuenca del río Senegal y planicies adyacentes, suroeste de Mauritania, norte de Senegal y suroeste de Mali.

La primera cita homologada en España de la collalba del Atlas fue en junio de 2010, en Castillo del Romeral, Gran Canaria, un ejemplar adulto de la entonces considerada subespecie de la collalba gris (Oenanthe oenanthe seebohmi).

En junio de 2020, se homologó una sorprendente observación en Zapardiel de la Ribera, Ávila, en plena Sierra de Gredos, a unos 2.400 metros de altitud. Un macho adulto, primera cita en la España peninsular (se citó otro ejemplar en Gibraltar, en 2005).

Hasta marzo de 2022 no volvió a observarse, en esta ocasión en Málaga, también un ejemplar adulto.