Esta semana tendrá lugar la romería de El Rocío y durante los próximos días más de 40.000 peregrinos de cerca de 90 hermandades de Huelva, Sevilla y Cádiz y otras partes de España y, alrededor de 4.000 vehículos atravesarán el Parque Nacional de Doñana, espacio protegido también por la legislación autonómica y por la comunitaria bajo la figura de la Red Natura 2000, la más importante red europea de protección de los hábitats y especies más valiosas y amenazadas de la UE. Un ejemplo de respeto por la naturaleza es la hermandad de la Línea.
Del 16 al 23 de mayo voluntarios, coordinados por SEO/BirdLife, vigilarán los nidos de aves protegidas al paso de los romeros por el espacio protegido de Doñana.
Un año más, miles de vehículos son autorizados a atravesar zonas de alto valor ecológico sin que exista un estudio que analice y evalúe sus impactos sobre el espacio y sus valores. Además, todos estos tránsitos se realizan durante un momento crítico para muchas especies que se encuentran en pleno período reproductor, atravesando territorios de cría de especies gravemente amenazadas como el lince ibérico o el águila imperial.
Según el propio plan de gestión del espacio Natura 2000 de Doñana, ninguna actividad puede autorizarse si tiene efectos negativos sobre los hábitats y las especies de interés comunitario. SEO/BirdLife considera que, tal y como se recoge en el artículo 6 de la Directiva Hábitats (92/43/CEE), es necesario realizar una evaluación previa ante la mera probabilidad de que una intervención sobre el medio natural o el paisaje de Doñana pueda afectarlo de forma apreciable o significativa.
Romería de El Rocío a su paso por Doñana. ©SEO/BirdLÑife
“Se trata de un espacio que acoge importantes valores de nuestro patrimonio natural como demuestran las figuras de protección que acredita, sumando a las ya citadas la de Reserva de la Biosfera, humedal de Importancia Internacional de la lista Ramsar y haber sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco” asegura Carlos Davila, técnico de SEO/BirdLife en Doñana.
Asimismo, la ONG recuerda que es la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía la administración responsable de la conservación de Doñana, y por tanto está obligada a garantizar la no afección al espacio protegido, evaluando los posibles impactos negativos producidos por el tránsito de las hermandades y regulando así los tránsitos de forma que se garantice el mantenimiento de los valores naturales por los que es mundialmente conocido el espacio.
Davila recuerda que “los tránsitos de las hermandades rocieras, como cualquier otra actividad que se desarrolla en el interior del espacio protegido, deben ser evaluados y cumplir con el plan para no afectar a los objetivos de conservación de Doñana”.
