La caza ilegal de aves migratorias en el Mediterráneo protagoniza un impactante trabajo recién realizado por National Geographic. La organización estadounidense publica un extenso y documentado reportaje titulado Last song for migrating birds y escrito por Jonathan Franzen, el novelista ganador del National Book Award que en los últimos tiempos ha obtenido gran éxito de crítica y público con libros como Más afuera (Editorial Salamandra, 2012). Franzen es también un entusiasta de la ornitología y un autor que ha mostrado en su obra una gran pasión por la naturaleza y un profundo conocimiento de los problemas ambientales.
En el reportaje, ilustrado con imágenes del fotógrafo de AP David Guttenfelder, Franzen hace un recorrido por diversos lugares del Mediterráneo, desde Egipto hasta Albania, encontrándose con cazadores, guardas, furtivos, vendedores y población local, narrando los diversos métodos de caza que se emplean en cada lugar y escuchando las explicaciones sobre las prácticas que llevan a cabo. Otras zonas del Mediterráneo como España, Italia, Francia o Malta son mencionadas también en un artículo que supone una denuncia mayúscula sobre la matanza indiscriminada de aves.
«Cada año, de una punta a otra del Mediterráneo, cientos de millones de aves, desde las paseriformes hasta las grandes planeadoras, se matan para comerlas, para enriquecerse, por deporte o por distracción. La matanza es totalmente indiscriminada, con un gran impacto en poblaciones de aves que ya están suficientemente machacadas por la destrucción o la fragmentación de sus hábitats», afirma Franzen en su artículo.
El trabajo de SEO/BirdLife
El texto publicado en National Geographic entronca con el trabajo y las denuncias que SEO/BirdLife lleva a cabo en defensa de las aves. En la página web www.cazailegalaves.es/ se recoge amplia información sobre esta tarea.
Cada año en España son cazadas o capturadas ilegalmente millones de aves. Son tiroteadas durante sus vuelos migratorios, mientras crían o están en pleno cortejo nupcial. Otras son capturadas en redes o quedan atrapadas por pegamento (liga) mientras esperan una muerte lenta o son golpeadas hasta morir. Precisamente, esta práctica de la caza con liga o pegamento ha protagonizado un intenso trabajo de denuncia por parte de SEO/BirdLife.
La técnica de caza con liga, untando con pegamento los árboles para que las aves queden atrapadas, es conocida como parany en las comarcas de Castellón y norte de Valencia. Esta modalidad ‘tradicional’ de caza, pese a estar prohibida desde 2002, cuenta con la tolerancia de las autoridades y se ha convertido en todo un ejemplo de perseverancia a la hora de incumplir las leyes de conservación de la naturaleza en nuestro país. Recientemente, el Tribunal Constitucional ha dictado una sentencia que deja claro definitivamente que el ‘parany’ es ilegal.
El artículo de Jonathan Franzen hace ver que, como ocurre con el parany en España, las aves se encuentran con todo tipo de amenazas a lo largo del Mediterráneo, una situación que afecta especialmente a las migratorias, cuyas poblaciones están en riesgo por la persecución indiscriminada. Hace menos de un mes, SEO/BirdLife participó en una reunión internacional en Túnez destinada a afrontar este problema. El uso ilegal de veneno -otra amenaza mayúscula para las aves migratorias- fue el asunto principal del encuentro.
El artículo de Jonathan Franzen en National Geographic puede leerse en inglés en este enlace.