Mañana – 19 de junio- se celebra el Día Mundial de los Albatros
El 19 de junio de 2021 se cumple el vigésimo aniversario de la firma del Acuerdo sobre la Conservación de Albatros y Petreles (ACAP), el principal acuerdo internacional dirigido a conservar los albatros, petreles y pardelas, uno de los grupos de aves más amenazados a nivel global. En el seno de este acuerdo el año pasado se instauró por primera vez el Día Mundial de los Albatros cuya segunda edición se celebra mañana y pone especial énfasis en las amenazas provocadas por las pesquerías.
De las 31 especies objeto del acuerdo, las 22 especies de albatros son las más vistosas y conocidas, pero no hay que olvidar otras igualmente interesantes y amenazadas. En el caso de España, su “albatros” particular es la pardela balear, una especie que solo cría en el archipiélago balear y que ostenta el dudoso honor de ser la especie de ave marina más amenazada de Europa.
Entre Wisdom y Quimera
Existe un ejemplar de albatros mundialmente conocido por su extrema longevidad. Se trata de Wisdom, una hembra de albatros de Laysan anillada en el atolón de Midway (Hawái) en 1956 (cuando ya era adulta, lo que significa que debió nacer en 1951 o antes), y que a sus 70 o más años acaba de sacar adelante un pollo. Su historia ha servido para llamar la atención sobre la situación de vulnerabilidad de las aves marinas.
Pero este grupo de aves tiene a su vez su propia portavoz en nuestro país. Se trata de Quimera, una hembra de pardela balear que fue anillada en la colonia de Sa Cella, en Mallorca, en 1986, cuando ya era “adulta” (lo que quiere decir que por lo menos había nacido en 1984). Esta pardela ha criado en la misma colonia desde entonces, y año tras año (con posibles descansos intermitentes) ha regresado para, entre marzo y junio, sacar adelante un pollo -si había suerte-. En mayo de 2016 se la marcó con un GPS, para conocer sus movimientos durante el periodo de cría y en 2018 se convirtió en protagonista de un cómic editado por el Govern Balear que dio a conocer de una forma muy original y artística esta especie. Pero su historia continúa y hace escasos días, el pasado 3 de junio, con 37 años de edad, este ejemplar ha vuelto a ser protagonista de una acción conservacionista, en esta ocasión un novedoso marcaje realizado por SEO/BirdLife.
No estaba sola…
Con el fin de mejorar el conocimiento de la costa norte de Barcelona -zona que en años recientes ha mostrado ser un área de alimentación muy importante para la pardela balear, así como una zona de elevado riesgo de capturas accidentales- SEO/BirdLife puso en marcha esta acción, con apoyo del proyecto Pufmed de la Fundación Biodiversidad: capturar pardelas en mar abierto y colocarles dispositivos GPS para conocer sus movimientos y su procedencia.
Entre finales de mayo y principios de junio se capturaron y marcaron 10 pardelas, entre ellas Quimera, de las cuales siete ejemplares han visitado colonias de cría. El trabajo muestra que las aves que visitan la zona tienen muy distintas procedencias, desde el islote de Tagomago (en el este de Ibiza) hasta Menorca. Y no solo se limitan a alimentarse en aguas de Barcelona; muchas de ellas se han desplazado posteriormente a zonas ya identificadas como ZEPA, como la plataforma marina del Delta del Ebre-Columbretes, o el Mar del Empordà. O han marcado zonas de gran interés más allá de las aguas jurisdiccionales españolas, en Argelia o el sur de Francia.
Quimera, al igual que las otras, fue equipada con el GPS y una anilla de lectura a distancia que hará que pueda ser identificada con facilidad en el mar. Como era de esperar, Quimera visitó Sa Cella, donde siempre ha criado, a los pocos días de ser marcada, y sigue deambulando por las costas de Cataluña y el Levante ibérico en busca de alimento.
“Los recorridos obtenidos con estos marcajes constituyen una guía esencial a la hora de proponer y establecer nuevas zonas de protección para estas especies. Más allá de las colonias de cría, las pardelas baleares, igual que sus parientes los albatros, pasan la mayor parte de su vida en el mar, donde encuentran numerosas amenazas, entre las que destaca la captura accidental en artes de pesca, como señala en esta ocasión el Día Mundial de los Albatros”, apunta Pep Arcos, coordinador del Programa Marino de SEO/BirdLife.
Cada año, cientos de pardelas baleares mueren en artes de pesca en el Mediterráneo, donde las capturas se concentran durante el periodo reproductor. El palangre demersal es el arte que presenta un mayor riesgo. SEO/BirdLife trabaja activamente promoviendo la colaboración de los pescadores para evaluar adecuadamente ese problema que nadie quiere, así como para buscar soluciones que beneficien a todos. De no conseguirlo, la pardela balear mantendrá el vertiginoso declive en el que se encuentra, que la podría llevar a la extinción total en poco más de 50 años.
Red Natura 2000 marina
Pese a que la Red Natura 2000 marina en España tuvo un punto de inflexión en 2014, cuando se pasó de cubrir el 1 al 8% del territorio marino, la mayoría de los espacios no cuentan con planes de gestión, por lo que la eficacia de su protección es aún limitada. Por otro lado, existen aún ciertas lagunas en la designación de la red. Ambos aspectos se están abordando de forma coordinada desde el proyecto Life Intemares, coordinado por la Fundación Biodiversidad, y en el que participa SEO/BirdLife.
Entre las lagunas de la red de ZEPA marinas, se encuentra esta zona de Barcelona que en años recientes ha mostrado ser un área de alimentación muy importante para la pardela balear, así como una zona de elevado riesgo de capturas accidentales, y que SEO/BirdLife se está encargando de estudiar.
Acerca del Programa Marino de SEO/BirdLife
SEO/BirdLife cuenta con un programa marino muy activo, con diversos proyectos en marcha que apoyan el trabajo de estudio y conservación de las aves marinas y sus hábitats. Actualmente destacan el Life IP Intemares, liderado por la Fundación Biodiversidad, Zepamar II (Programa Pleamar de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, cofinanciado por el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca), Pufmed y Pardeles (financiados por la Fundación Biodiversidad a través de su convocatoria para proyectos de biodiversidad marina), el Life PanPuffinus (liderado por BirdLife Malta), y el proyecto de gobernanza pesquera (financiado por la Fundación MAVA a través de BirdLife International). Desde 2013 participa activamente en los grupos de trabajo de ACAP, prestando especial atención a la pardela balear, especie de la que realiza un seguimiento en las colonias reproductoras en colaboración con IRBI.
Antecedentes del Día Mundial del Albatros
En 2019, el Comité Asesor del ACAP declaró que las 31 especies comprendidas en el Acuerdo aún se ven amenazadas por una crisis de conservación, y miles de albatros, petreles y pardelas mueren cada año como resultado de la pesca. Para lograr una mayor conciencia sobre esta crisis, el ACAP instauró el Día Mundial del Albatros, que a partir de 2020 se celebrará cada año el 19 de junio, fecha en que se firmó el Acuerdo en 2001. El Día Mundial del Albatros se implementó con éxito en 2020 con el tema “Erradicar las plagas de las islas” (Eradicating Island Pests), ya que muchas especies de albatros deben enfrentar las amenazas de las especies introducidas por el ser humano en los islotes de reproducción, como ratones, ratas, gatos y cerdos. El tema de este año destaca las continuas amenazas provenientes de las pesquerías.